No hay derecho a que Aranda esté conectada con Madrid con una empresa de tan bajo nivel

Me gustaría formalizar una queja, no se si irá a parar a algún sitio, pero yo lo intento.  No hay derecho a que Aranda esté conectada con Madrid con una empresa de tan bajo nivel. Y luego dicen que por qué la gente usa el transporte con coche compartido. La empresa Aisa, sucursal de Alsa, tiene un servicio nefasto:

 

• En la estación de autobuses de Madrid no hay opción a comprar billetes, sólo puedes comprarlos por internet o al mismo conductor a la hora del viaje. El lunes pasado acompañé a mi madre a Avenida de América a coger el autobús de las 11.  Allí había 2 personas mayores que se quedaron sin billete, ellos no manejan internet, y no tenían a nadie que les comprara el billete, y al llegar al autobús estaba lleno, así que el conductor les emplazó a volver a las 15 hrs “a ver si había mas suerte”.  A esa hora yo también volví a la estación porque cogía el bus para Aranda, y allí estaba la misma pareja que una vez mas se quedaba en tierra porque no había billetes para ellos.  No les dieron más solución que “vuelvan las 18 hrs. a ver si hay sitios libres, o váyanse a la estación Sur que allí si que hay taquilla para comprar el billete con antelación”. Cómo es posible que en las máquinas de Alsa de Av. América (porque ya no hay ni una sola persona física vendiendo billetes en taquillas) no se puedan comprar billetes de una filial, Aisa.  Es inconcebible que te tengas que recorrer Madrid de estación en estación para comprar un billete con antelación si no sabes manejar internet.
• Los autobuses nunca jamás salen a su hora, mínimo 10 minutos de retraso cuando no son 20, porque abren tarde las puertas, porque el conductor decide que la gente se puede sentar donde quiera y tu vas con tu asiento, porque has cogido ese por el motivo que sea, que quieres delante porque te mareas, que quieres ventana o quieres pasillo para estirar la pierna, el motivo que sea, pero el conductor le dice a la gente al subir “puedes sentarte donde quieras” y claro, ahí se produce el caos. Tu quieres tu asiento, pero la señora o señor ha decidido que le gusta más el tuyo y de ahí no se mueve porque el conductor así lo ha dicho.  No señor, si yo compro un asiendo concreto tendré mi motivo y quiero ese asiento.
• Le pides al conductor que ponga el aire acondicionado, y su respuesta “es que el autobús es nuevo y no se cómo funciona”

 

Y como estas, muchas más historias que os podrían contar los demás usuarios de este servicio. Mañana me toca coger otra vez el autobús, a ver qué nueva aventura me depara.