“Estamos orgullosísimos de que seáis una parte fundamental que este Sonorama Ribera, así que el nombre de todo nuestro equipo, gracias”. Con estas palabras de agradecimiento, el coordinador del festival Sonorama que hoy comienza en Aranda de Duero, Javier Ajenjo, se dirigía a los agentes que forman parte de los cuerpos de Seguridad del Estado (Policía Nacional y Guardia Civil), así como a los efectivos de la Policía Local y Protección Civil de Aranda de Duero, extendiendo el reconocimiento a los bomberos y a los voluntarios de Cruz Roja.
Un mensaje también de bienvenida que se ha dado por parte del subdelegado de Gobierno en Burgos, Pedro de la Fuente, que ha presentado el dispositivo de seguridad que se despliega desde ahora en Aranda de Duero. En el recinto del Picón, así como en las calles de la ciudad.
“Un festival envidiable para para muchos otros festivales”, argumentaba de la Fuente, teniendo en cuenta que Sonorama contará las 24 horas del día con el apoyo de los cuerpos y fuerzas de seguridad, convirtiendo al Sonorama en un evento con calidad también en cuanto a seguridad. Helicóptero, drones, policías a caballo, brigadas de control de subsuelo, efectivos de los TEDAX (desactivación de artefactos) y una unidad de Atención a la Familia y la Mujer se dan cita desde hoy miércoles y hasta el próximo domingo.
No habrá un punto violeta, advierte, sino centenares de ellos, teniendo en cuenta que todas las personas que trabajan en el festival cuentan con la formación necesaria para saber cómo actuar y a quién avisar en el caso de que tengan lugar intimidaciones o acosos a las mujeres. “El trabajador sabe lo que tiene que hacer, sabe cómo va dirigirse a nosotros rápidamente y cuáles son los protocolos de comunicación inmediatos para que vengan directamente un agente”, señala el jefe provincial de Policía Nacional, Jesús Nogales.
Por parte del Ayuntamiento de Aranda de Duero, ha sido el alcalde, Antonio Linaje, el encargado de dar la bienvenida a las personas que forman el dispositivo, para convertir a Sonorama “en uno de los festivales, sino el más seguro de España”.
Habrá agentes uniformados, pero también vestidos de paisano. Como también la Policía Nacional se verá reforzada por los agentes de la Guardia Civil. El capitán jefe de la Guardia Civil de Aranda de Duero, José Enrique Muñoz, explica que de su mano está crear “un primer filtro en acceso al Sonorama” con la implantación de diversos dispositivos operativos.
La Policía local también se vuelca durante estos días, para los que lleva trabajando, comenta el jefe Francisco Polanco, desde el día siguiente en el que acaba cada edición. “Esperemos que este año sea otro año más y todo el mundo pueda disfrutar de la mejor manera”, dice.
Por parte de Protección Civil, alrededor de 60 voluntarios trabajarán en esta edición, centrándose, sobre todo, argumenta el jefe de la agrupación José Luis García, en la plaza del Trigo. Él pide a la gente “que sea cívica, que respete el centro de Aranda y que utilice los baños que se ponen a disposición para ellos”.
“Necesitamos que no pase nada, eso es lo mejor que puede pasar y hemos trabajado mucho a lo largo de todo el año para que ello suceda”, termina diciendo Javier Ajenjo, recordando que gracias a festivales como Sonorama miles de familias viven de la cultura. Son 1.400 puestos de trabajo directos los que crea este gran evento arandino durante estos días, que genera un impacto directo económico de alrededor 20 millones de euros, que se suman a los 15 millones de euros de impacto mediático. Un festival “en la España Vaciada” que quiere convertirse en “una España llena de oportunidades, llena de gente que se queda a luchar aquí y gente que lucha para que la gente que se tiene que ir vuelva y se encuentre un sitio mejor”, explica Ajenjo. Un festival, prosigue, que sigue reivindicando un tren, una A-11 finalizada, “y vamos a seguir luchando por ello, que no piensen que nos vamos a rendir porque eso no entra en nuestros planes”.
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