Finalmente, y tras una larga polémica sobre cuál sería el combustible que movería los dos autobuses que el ayuntamiento de Aranda de Duero va a comprar para realizar el servicio urbano, esta mañana se ha aprobado que serán microbuses de 28 plazas (14 con asiento y 14 de pie), y diésel.
Como era de esperar, la crítica de la oposición, a excepción de VOX, se ha puesto de manifiesto. El grupo más incisivo ha sido el grupo mayoritario del PSOE. Recuerda Ángel Rocha que la premisa que existía era “que el vehículo tenía que ser sostenible”. “Hay que tener voluntad y es lo que este equipo de gobierno no ha querido nunca. La empresa quería diesel y el ayuntamiento le está haciendo juego a la empresa”, ha manifestado, recordando que no además de vehículos eléctricos existen otras opciones para la compra de vehículos menos contaminantes.
En esa misma línea se manifestaba la agrupación de Podemos, recordando que “todas las ciudades están comprando vehículos respetuosos del medioambiente y siguiendo directrices de la empresa adjudicataria han comprado diesel”, decía Andrés Gonzalo, recordando que mientras que se efectúa esta compra, por otro lado “en este ayuntamiento se está trabajando por la agenda urbana”.
Los no adscritos Mar Alcalde y Sergio Ortega se mostraban también en contra de esa compra. “Estamos perdiendo una oportunidad. Los tiempos están para otras cosas y no lo estamos haciendo bien desde el departamento medio ambiente”, señalaba Mar Alcalde.
El equipo de gobierno defiende el diesel para los buses de Aranda
Desde el equipo de gobierno se asegura que la compra de estos microbuses con este tipo de carburante viene avalada en base a los informes que se han realizado. El concejal de Urbanismo, Alfonso Sanz, recuerda que los dos autobuses que en estos momentos prestan el servicio urbano tienen 18 y 20 años, son contaminantes y están obsoletos. “No se puede decir que no hemos intentado llegar a acuerdos, intentamos buscar unos autobuses eléctricos”, asegura, señalando que han ido más allá en la búsqueda de vehículos menos contaminantes, sin encontrarlos. El informe, recuerda el edil popular, indica que las baterías de estos buses “no aguantan”. A ello añade que mientras que esta compra permitirá que el 1 de enero puedan comenzar a prestar servicio los nuevos autocares, “uno eléctrico tardaría mucho más”.
“Se ha trabajado en encontrar otro vehículo y no se ha podido encontrar, porque en Aranda no se necesitan de 12 metros, sino de 8,55”, añadía Francisco Martín Hontoria desde Ciudadanos.
Desde la agrupación de VOX, Sergio Chagartegui también defiende la postura del equipo de gobierno y calificó el debate de “una especie de mitin ecologista”. “Para los vehículos eléctricos hay problemas con el sitio carga, el tamaño de batería implicaría reducir plazas, se valoraron vehículos adaptados, pero con un motor modificado se perdía la garantía del fabricante”, indicaba, seguro de que “estamos yendo por el camino adecuado porque en el tamaño que necesitamos no hay ninguna otra alternativa”.
También en ese sentido se situaba el concejal no adscrito Vicente Holgueras, quien considera que “es una mejora respecto a lo que tenemos, mucho menos contaminantes que los de ahora y creo que se están adquiriendo lo más adecuado en este momento”.
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
|