ALEA exige que las ludotecas permitan el acceso a los niños con discapacidad

Llueve una crítica sobre el pliego de la licitación de las ludotecas municipales en la que precisamente hoy finaliza el plazo para la presentación de las ofertas. La crítica la lanza la Asociación para la atención de necesidades especiales en menores y jóvenes (ALEA), que no entiende cómo este pliego ha excluido a los niños y niñas con discapacidad y necesidades especiales.

Por ello exige la paralización y subsanación del expediente con el fin de que cumpla la ley. Preocupados y descontentos con el documento que ha aprobado el Ayuntamiento de Aranda de Duero, no entienden los integrantes de ALEA que no se haya hecho mención alguna a los menores con necesidades especiales y discapacidad, lo que “representa una grave omisión de derechos para este colectivo”.

La denuncia que hoy hacen pública ya se hizo, apuntan desde ALEA, el pasado 12 de noviembre a los concejales de Educación y Servicios Sociales, como también al servicio técnico de contratación. Solicitaban una aclaración sobre si se ha tenido en cuenta a los menores con discapacidad en el contrato, proporcionando información que no ha sido accesible hasta la fecha. Y en el caso de que se hubiese ignorado se exigía detener el proceso de licitación para actualizar el pliego.

La respuesta hasta ahora, comentan, ha sido el silencio a excepción de la del concejal de servicios sociales “aludiendo a que, en palabras del concejal de educación, no hay ningún problema en la gestión y funcionamiento de las ludotecas, y que si se detecta algún problema se le comunique”.

La poca respuesta genera desconfianza en ALEA, porque tienen dudas “de que el servicio pueda llevarse a cabo con garantías para los niños y niñas con discapacidad y necesidades especiales sin modificaciones sustanciales en el pliego de contratación, ya que este debería garantizar que la empresa adjudicataria aporte los recursos necesarios”.

¿Qué recursos son? Ni más ni menos que la formación y experiencia adecuadas de los técnicos que allí trabajen y el cumplimiento de las ratios dependiendo del grado de dependencia de cada usuario de la ludoteca.