Campaña en colegios para fomentar la convivencia y prevenir actos vandálicos entre jóvenes

La Policía Local de Aranda de Duero ha puesto en marcha una nueva campaña educativa en centros escolares dirigida a menores, con el objetivo de prevenir comportamientos incívicos, actos vandálicos y el consumo de sustancias estupefacientes. La iniciativa forma parte de un plan más amplio de sensibilización y convivencia ciudadana, que busca reforzar los valores de respeto, civismo y responsabilidad entre los jóvenes.

El programa incluye charlas en colegios e institutos, en las que los agentes explican la repercusión que tienen los daños en espacios públicos, los grafitis o los altercados entre grupos, así como los riesgos del consumo de drogas y sus consecuencias físicas, emocionales y familiares. También se aborda la educación vial y el uso responsable de vehículos de movilidad personal (VMP).

Además, la Policía Local colabora con la Fiscalía de Menores en actuaciones de mediación entre grupos juveniles, implicando a los tutores legales en la firma de compromisos que fomentan la convivencia y evitan la reincidencia en conflictos. La estrategia prioriza la prevención frente a la sanción, con el objetivo de promover la corresponsabilidad ciudadana en el cuidado del entorno urbano.

Días atrás, durante un servicio preventivo en el barrio de La Estación, los agentes sorprendieron a cuatro jóvenes —tres de ellos menores de edad— en posesión de seis botes de espray y material de pintado. Los objetos fueron intervenidos de forma preventiva y se informó a los padres de los menores.

 

Dos detenciones

El fin de semana, por otra parte, ha dejado 94 intervenciones por parte de la Policía Local. Entre ellas, destacan dos detenciones por violencia en el ámbito familiar en colaboración con la Policía Nacional: una mujer detenida por agredir a su pareja el sábado por la noche, y un hombre arrestado la madrugada del lunes tras una agresión en un domicilio. También se instruyeron diligencias a un conductor por negarse a realizar las pruebas de alcoholemia tras circular de forma anómala por la calle Isilla.

Asimismo, se levantaron actas por faltas de respeto a los agentes, por hacer necesidades fisiológicas en la vía pública y por infracción de la Ley de Protección de los Animales, al no vigilar adecuadamente a una mascota.