Los padres con hijos en el colegio Fernán González o que viven cerca de la glorieta Rosales se sienten decepcionados al ver que los niños no pueden utilizar una de las instalaciones de este espacio de la ciudad. Hace unas semanas vieron cómo se cerraba la puerta de las pistas que se abrieron a finales de diciembre y no saben cuándo se podrán volver a utilizar.
En DR nos hemos puesto en contacto con la concejala de Urbanismo y Obras, Ana María Hervás, para que explicase qué ha sucedido con estas pistas y, sobre todo, cuando volverán a abrirse.
“Se cerraron porque el estado de una de las porterías y de las canastas podía suponer un riesgo”, argumenta Hervás. Se quiso comprobar si el deterioro respondía a un mal uso, a un defecto en la instalación o a un mal estado de los propios equipos. “Es obvio que con tan poco tiempo de uso tiene que concurrir alguna de estas responsabilidades”, explica la edil, y con la empresa que instaló los equipos se está abordando el asunto.
Los elementos han sido retirados “porque no son aptos para su uso en este momento, ya pueden suponer un riesgo de desprendimiento”. Desde el consistorio se señalaba que las pistas se abrirán una vez quitados, pero es algo que aún no ha ocurrido. también, sin decir cuándo, aseguran que están trabajando “para que se puedan reponer los equipos a la mayor brevedad”.
“Esta es una zona con muchos niños pequeños, igual la más numerosa de Aranda, y al menos debieran abrir este espacio para que puedan entrar a jugar”, reclama un padre, reivindicando más zonas para que puedan ser utilizadas.
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