El pliego de basuras y limpieza sale adelante gracias a la oposición

Gracias a la abstención de los grupos del PP, PSOE y Vox, el Ayuntamiento de Aranda de Duero ha conseguido aprobar las bases para sacar a licitación el contrato de los servicios de limpieza viaria y recogida de residuos sólidos urbanos de la ciudad. Una votación, el de la oposición, que se ha hecho aun a pesar de que no están conformes del todo con el pliego, pero en un ejercicio de la responsabilidad para que por fin la licitación siga adelante, tras el descalabro del anterior intento.

Se intentó aprobar en el pleno ordinario del mes de noviembre, pero se dejó sobre la mesa al entender la oposición que el hecho de no estar presente el concejal responsable del área de Medio Ambiente. Ahora el punto se ha llevado de nuevo a un pleno extraordinario que se ha celebrado hoy, y el resultado, por fin, ha sido positivo para que Aranda de Duero pueda contar con un servicio contratado sin tener que alargar más la situación de continuidad, teniendo en cuenta que el anterior contrato finalizó hace más de dos años con prórrogas incluidas.

Los recursos de Urbaser, la actual adjudicataria, hasta en dos ocasiones al Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales de Castilla y León (TARCyL) es lo que ha provocado el retraso de la nueva adjudicación. Entre tanto, el equipo de gobierno ha optado por actualizar el anterior pliego para minimizar los posibles recursos y llevar a la Junta de Castilla y León el estudio económico que aprobó la administración regional.

Ciñéndonos al nuevo pliego que se publicará en breve, gira en torno a los 3,7 millones de euros anuales, a lo que hay que sumar IVA. Contará con mejoras, como una rebaja del tiempo del contrato. En vez de los 11 años que contemplaba el anterior pliego se establece un periodo de 9 años. Se añade, ya lo hacía el pliego anterior, la implementación de la recogida separada de residuos orgánicos, un quinto contenedor. Y la renovación de la flota de vehículos de recogida de residuos, la de los contenedores, y la revisión de las rutas de recogidas.

Para la oposición, el estudio económico está desfasado, no se ajusta a la realidad, ha habido poca información y pocas comisiones, y ninguna opción a que sus propuestas se tuviesen en cuenta. A pesar de ello, los 11 concejales que la conforman han optado por abstenerse para que la licitación pueda hacerse.