Es una petición que lleva años produciéndose sin que tenga ningún efecto. El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, José Luis Concepción, vuelve a incluir en su memoria la necesidad de que Aranda de Duero cuente con un tercer juzgado de instrucción.
Y va más allá, que sea dotado con funcionarios titulares, “pues la existencia de funcionarios interinos y su continuo cambio dificulta un funcionamiento normal de la oficina”, recuerda. Porque este es un hecho que se sucede continuamente en los dos juzgados arandinos. En el juzgado número 1, en menos de un año, llegaron a pasar siete jueces, provocando un retraso muy importante en los procedimientos. Por fin, el pasado mes de febrero se producía el nombramiento de una nueva titular: María Grimi Bujanda.
No es la primera vez que se advierte que el de Aranda es uno de los juzgados con mayor carga de trabajo de la provincia de Burgos. También añade en su memoria la situación de Miranda de Ebro, ciudad para la que reclama también un tercer juzgado.
Del mismo modo, en cuanto a recursos materiales, Concepción reclama la dotación de textos legales actualizados para los magistrados, la creación de un sistema de criba de los documentos, la mejora de dos herramientas digitales; Lexnet y Visor, y la creación de dependencias adecuadas para cumplir los derechos de las víctimas con especiales necesidades de protección.
En Burgos
La memoria también incluye necesidades para la sala de lo social de Burgos, para donde reclama el refuerzo de los servicios comunes y una mayor funcionalidad.
En la sala de lo contencioso administrativo pone en aviso que hay una descompensación de secciones en cuento a la plantilla. Para la Audiencia provincial reclama una sexta plaza de magistrado, como también pide la creación de un cuarto juzgado de lo social de forma urgente.
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