El TSJ confirma que Aranda de Duero deberá autorizar una granja escuela en suelo rústico

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha rechazado el recurso de apelación interpuesto por el Ayuntamiento de Aranda de Duero y ha confirmado la sentencia que obliga a conceder autorización para la construcción de una granja escuela en suelo rústico del municipio.

El fallo ratifica la resolución anterior del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº 1 de Burgos, que ya había dado la razón a la promotora del proyecto, al considerar que la denegación de la licencia por parte de la Junta de Gobierno Local, en agosto de 2023, no se ajustaba a derecho.

La Sala entiende que la actividad prevista, enfocada a la educación ambiental y al ocio ligado al medio natural, “reúne el interés público exigido por la normativa urbanística” y “no implica un uso residencial”, uno de los principales argumentos que había esgrimido el Ayuntamiento para denegar el permiso.

El tribunal recuerda además que en un procedimiento judicial previo ya se había reconocido a la promotora el derecho a obtener la licencia urbanística y ambiental, por lo que no cabe reabrir el debate sobre la naturaleza del proyecto. “No puede considerarse que se destine a vivienda ni a albergue, pues el propio Ayuntamiento aceptó en el proceso anterior las modificaciones que eliminaron cualquier uso residencial”, señala la sentencia.

En su resolución, el TSJ también reprocha al Ayuntamiento haber mantenido una interpretación “restrictiva y contradictoria” de la normativa, subrayando que el uso solicitado encaja en los supuestos de “ocio vinculado al medio natural” previstos en el Plan General de Ordenación Urbana y en el Reglamento de Urbanismo de Castilla y León.

El fallo impone al Consistorio el pago de las costas del proceso, fijadas en 1.500 euros, y confirma íntegramente la sentencia recurrida. La resolución no es firme y contra ella cabe recurso de casación ante el Tribunal Supremo.