El Ayuntamiento de Aranda de Duero será uno de los 18 edificios españoles que se iluminarán de verde durante esta noche, formando parte así parte de los municipios concienciados con las personas que sufren el Trastorno del Espectro Alcohólico Fetal.
Y es que es hoy cuando se celebra el Día del síndrome alcohólico fetal para recordar la importancia que tiene la no ingesta de alcohol durante el embarazo. En estos trastornos se agrupan un conjunto de anomalías físicas, mentales, conductuales y cognitivas que un niño puede presentar cuando ha estado expuesto al alcohol durante su desarrollo prenatal, es decir, cuando su madre gestante ha consumido alcohol durante el embarazo.
Esta patología no se cura, pero es 100% evitable. El alcohol pasa con facilidad a través de la placenta y llega al embrión o al feto. El grado de afectación depende de muchos factores, pero en general se puede asegurar que el alcohol impide el desarrollo normal del cerebro, lo que provoca en la mayoría de los casos dificultades de aprendizaje, así como problemas de conducta y de integración social.
Los niños con estos trastornos tienen dificultades cognitivas básicas, son socialmente rechazados, víctimas de acoso y fácilmente vulnerables. Tiene una incidencia 10 veces mayor al síndrome de Down y ligeramente superior al trastorno del espectro autista. A pesar de ello, actualmente se estima que en España 6 de cada diez embarazas consumen algo de alcohol durante el embarazo.
Además del edificio del Ayuntamiento, se teñirá de verde el puente mayor que cruza el río Duero.
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