De forma inminente comenzarán las obras correspondientes a la adecuación de la antigua gasolinera de la plaza de la Virgencilla. Unas obras que forman parte de un proyecto más ambicioso, como es el arreglo de las aceras de la calle San Gregorio y la puesta en marcha de una reorganización en el tráfico, que permitirá ampliar el espacio peatonal en los Jardines de Don Diego.
De momento esa reorganización será provisional, para estudiar si lo que se ha ideado funciona y consigue mejorar el tráfico. El cambio consistirá en la peatonalización de la calzada de los Jardines de Don Diego que se encuentra entre la entidad de La Caixa y El Asador de Aranda – de momento con jardineras- y en el cambio de sentido al tráfico rodado de la calle San Gregorio que, en vez de ser de la plaza de la Virgencilla hacia Sol de las Moreras como ahora, será al contrario. A ello se añade la inclusión de una rotonda al principio de San Gregorio y en parte de la plaza de la Virgencilla para facilitar la salida de la calle San Gregorio para incorporarse en cualquiera de los sentidos (hacia San Francisco o hacia la calle Postas), aprovechando el gran espacio que existe en ese pico.
La parte de la gasolinera contará con una parada de autobús a ras de suelo y se hará una urbanización completa, y finalmente se dará una solución al problema de peligro que existe en un punto utilizado por muchas personas para cruzar la calzada sin señalización para ello. Se instalará un paso de cebra justo a la salida de la plaza de la Constitución hacia la plaza de la Virgencilla (a la altura de Cruz Blanca), eliminando la que se encuentra más hacia los Jardines, cerca del termómetro que allí se encuentra.
Será la empresa Blasgón la que se encargue de realizar las obras con una inversión de 87.610 euros.
Se generan dudas en la oposición
Por parte del PSOE, el principal grupo de la oposición, advierten que son varias las dudas que le genera este cambio impulsado por el equipo de gobierno, sobre todo en lo que se refiere al cambio de sentido de circulación en la calle San Gregorio. Podría, advierten, ocasionar problemas a la hora de que los coches vayan a incorporarse hacia San Francisco o hacia la calle Postas.
A ello se añade, comenta su portavoz Mar Alcalde, el hecho de que exista un garaje en la calle San Gregorio con más de un centenar de plazas que pertenece a tres comunidades de vecinos. “Se va a montar un buen follón en ese tramo en concreto”, se teme Alcalde, advirtiendo que el tráfico en ese punto “va a estar seriamente dañado”. Del mismo modo se plantean otros interrogantes, como qué ocurrirá con el espacio de taxi y los reservados para los vehículos de la policía local. “Nos genera muchas dudas que vaya a mejorar, más bien va a haber un serio embotellamiento”, terminan diciendo.
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