El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Aranda de Duero ha acordado la libertad provisional sin fianza del hombre detenido el pasado domingo por agredir a un árbitro al finalizar el partido de fútbol. Una agresión que llevó a cabo tras el encuentro del equipo de cadetes de Aranda Riber contra el Capiscol de Burgos, este último el equipo en el que juega el hijo del agresor.
Sale en libertad sin fianza para esta persona investigada por un delito de lesiones, pero sí con la obligación de comparecer en sede judicial cada quince días.
El Juzgado le ha impuesto además una serie de medidas cautelares como la prohibición de aproximarse a la víctima, su domicilio, su centro de trabajo o cualquier otro lugar frecuentado por la misma a menos de 500 metros. También de comunicarse con él de cualquier forma.
La tercera prohibición es la de acudir y acceder a campos de fútbol y establecimientos deportivos con campo de fútbol, así como aproximarse a los mismos a menos de 500 metros durante las dos horas anteriores y posteriores a eventos deportivos en los que participe el hijo del investigado o su equipo.
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