Mantenimiento y mantenimiento para los presupuestos de 2024 de Aranda

Los grupos municipales ya conocen de primera mano la intención que tiene el equipo de gobierno para los próximos presupuestos de Aranda de Duero, los relativos a 2024. Durante toda esta semana han tenido lugar las reuniones con las distintas formaciones donde el concejal de Hacienda ha dado a conocer sus propuestas en busca de la negociación necesaria para su aprobación. “Ojalá que entre todos nos pongamos de acuerdo sabiendo los pocos recursos presupuestarios y de personal que tenemos”, comenta Guillermo López.

Porque la intención del equipo de gobierno pasa por dos objetivos: lograr unos presupuestos “reales” donde los gastos corrientes incluyan aquellas partidas que durante los últimos años han estado incluidas en los remanentes de tesorería, como el pago de horas extras o una partida de fiestas, e invertir en mantenimiento.

Mantenimiento en el que será muy importante, si así lo respetan la mayoría de los concejales, el dirigido a dos instalaciones municipales: el Santiago Manguán y el Juan Carlos Higuero. 600.000 euros se quieren dirigir a ello teniendo en cuenta que “llevan construidos 40 años y la inversión ha sido mínima”, comenta.

Y para mantenimiento, en calles y en polígonos industriales, se dirige la propuesta del equipo de gobierno. Se pretende habilitar una partida de 200.000 para el arreglo de aceras. “Queremos que haya una partida clara para ello y ojalá fija en los próximos años para posibilitar el arreglo de baldosas de una forma rápida”, señala López. Porque apenas existe, explica, indicando que “lo que se hacían eran inversiones a calles completas, pero no al mantenimiento diario”.

Para el sostenimiento de los polígonos industriales se quiere aumentar esa cantidad con una partida que tampoco se ha contemplado hasta ahora. El equipo de gobierno propone 300.000 euros para ello teniendo en cuenta que Aranda es una ciudad industrial y que “hace falta dar una buena impresión a las empresas que vienen en busca de un nuevo sitio donde instalarse”.

Otro arreglo que se quiere realizar es el de la sustitución de la conducción de agua potable desde Tubilla hasta Aranda de Duero, aún sin cuantificar.

Otras inversiones que tendrán que incluirse en esta anualidad son los sobrecostes que el Ayuntamiento deberá asumir de las obras que se están ejecutando como las piscinas, los Jardines de Don Diego o el Puente Bigar. El primero supondrá un añadido de medio millón de euros y de los dos últimos aún no se sabe la cantidad que será necesaria.

Y no habrá nada para la Ronda Interna, explica el concejal, porque el proyecto está a punto de salir a licitación “y hasta que no esté hecho no sabremos lo que va a costar”.

Todo ello para un presupuesto que se prevé que rondará los 46 millones de euros, cuatro más que los de 2023, de los que 6 millones irán destinados a las inversiones teniendo en cuenta que se aumentarán las partidas en gastos corrientes de personal, -incluyendo las horas extras previsibles - el aumento del 3% del salario- o, por ejemplo, con una partida más real en materia de festejos.