Raquel González se dedicará al Senado en exclusiva

La que ha sido alcaldesa de Aranda de Duero durante los últimos doce años, Raquel González, anuncia que cesará como concejala del Ayuntamiento de la ciudad. Tras lograr una de las tres representaciones del PP burgalés para el Senado en las pasadas elecciones generales, asegura que lo que pretende es dedicarse al 100% a su nuevo cometido político.

No sabe aun cuando renunciará al acta de concejal que recogerá, teniendo en cuenta la lista electoral, la anterior concejala de Cultura Teresa Bermejo. De momento lo ha anunciado de forma informal, pero lo cierto es que el próximo 17 de agosto González acudirá a la constitución del Senado para ocupar su escaño. “Ya estaba decidido desde antes de las elecciones que si salía senadora me iba a dedicar a ello en cuerpo y alma, como me gusta dedicarme a lo que hago. Defenderé desde allí los intereses de Aranda y me va a llevar mucho tiempo”, comenta la futura senadora.

¿Cómo defenderá esos intereses? Asegura que desde la parte más territorial e impulsando políticas que beneficien al municipalismo, como la mejora del acceso a la administración o la estabilización de los trabajadores. Por ahora, no ha llegado el momento de repartir las comisiones, pero asegura que si le dan a elegir pedirá las orientadas a la justicia (no en vano ha sido abogada durante 18 años), régimen interior, condiciones laborales, innovación, o seguimiento de la Ley de contratos del sector público. “Ese que tantos quebraderos de cabeza nos da a los ayuntamientos”, comenta. También le motiva el área internacional, convencida de que “es importante garantizar Europa”.

 

Más moderna, dinámica, sostenible y accesible

A ella le hemos pedido un balance de su paso por la alcaldía de Aranda y este es positivo. Ante las críticas, que han sido las que más se han preocupado en alzar la voz, quedan multitud de apoyos y agradecimientos no tan públicos.

Raquel González asegura que Aranda hoy es una ciudad mucho más moderna y dinámica, “y si alguien pretende tapar el sol con el dedo es difícil”. Una ciudad que está preparada para la llegada de grandes eventos como las Edades del Hombre, el Sonorama o los que estén por venir. “No los hemos tenido miedo”, asegura.

También destaca que Aranda es hoy en día más sostenible, aunque no se perciba por el ciudadano. La utilización de asfalto absorbente para las calles, el cambio de luminarias o la apuesta por la red de calor son algunos de los ejemplos. “Es probable que muchos ciudadanos no lo detecten subjetivamente pero objetivamente hemos ayudado al medioambiente”, señala.

Y también, continúa, Aranda es más accesible “con prácticamente todas las aceras con rebajes, algo de lo que pocas ciudades de España pueden presumir”.

Otra cosa de la que se siente orgullosa es de haber conseguido que el proyecto del hospital sea una realidad con una adjudicación ya hecha, algo por lo que “he peleado con uñas y dientes”. Y añade un objetivo cumplido por su corporación, la de contar con un nuevo Plan General de Ordenación Urbana adaptado a la legislación, algo que no ocurrió, recuerda, en el año 2000 con el último que se aprobó.

Y una alegría más, haber ayudado a pasar del 22% de tasa de paro de cuando llegó a la alcaldía a la del 7% de estos momentos. “Dejo una ciudad con un desempleo bajísimo y estoy orgullosa de haber contribuido con la estabilidad de los gobiernos”, comenta, señalando que “he sabido entenderme con todos los partidos políticos”. Recuerda que ha conseguido el apoyo del PSOE, de IU y Podemos “en bastantes temas” y equipos de gobierno estables. “Agradezco a mis compañeros de los diferentes mandatos haber contribuido a esta estabilidad”, señala.

“Lo dejo con cierta tristeza, porque la relación directa con el ciudadano se consigue a través del Ayuntamiento, pero conozco la administración y espero que desde el Senado pueda impulsar políticas del municipalismo”, termina diciendo la futura senadora.