Las buenas noticias continúan para el hospital de Aranda de Duero, que abre desde hoy la oportunidad a los familiares de los pacientes ingresados a realizar visitas. Eso sí, con restricciones y mucha precaución.
Porque el logro de haberse convertido en el primer hospital de Castilla y León sin pacientes COVID en su interior, gracias a la buena marcha de la comarca en el descenso de contagios por coronavirus, lleva a la gerencia del centro sanitario a la decisión de “relajar un poco las medidas”. Con esto se consigue, señala el responsable del Santos Reyes Evaristo Arzalluz, “humanizar la atención sanitaria hasta donde sea posible, aunque sin poner en riesgo la continuidad de en esta situación tan buena que tenemos, como es no tener ningún paciente COVID ingresado”.
De esta manera, los enfermos que se encuentran en habitaciones de las diferentes plantas podrán tener la visita de un solo familiar durante una hora al día, de 19:30 a 20:30 horas. En el caso de la Unidad de Cuidados Intermedios, el horario de visita será de 17 a 18 horas.
“Vamos a hacer todo lo posible para que los que entren vayan protegidos, para que no salgan de la habitación de su familiar durante el tiempo que estén y que cuando acabe la hora salgan directamente a la calle”, apunta el gerente del hospital, añadiendo que “ estaremos atentos en todo momento por si se produce algún tipo de contagio”. Y es que el equipo directivo es consciente de que la pandemia ha provocado que tanto pacientes como familiares estén cargando con medidas muy duras “que han supuesto mucho sufrimiento” al no poderse comunicar salvo a través de videollamadas y teléfonos móviles.
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