Tercera protesta de los veterinarios arandinos contra la regulación del sector

Además de cerrar sus clínicas, con el perjuicio que esto supone, los veterinarios arandinos han viajado esta mañana hasta la capital burgalesa para concentrarse ante el edificio de la subdelegación de Gobierno de Burgos. Al igual que han hecho otros profesionales del sector hoy en toda España, piden que sean escuchados.

Es la tercera vez que los profesionales arandinos no acuden a trabajar para manifestarse. Lo hicieron el 11 de febrero para concentrarse a las puertas del Ayuntamiento de Aranda de Duero, y también lo hicieron el 5 de marzo acudiendo a Madrid para manifestarse ante el Ministerio de Agricultura.

Con frases en las pancartas como “ni con siete vidas podremos con tanto papeleo·, “muerto el perro sólo nos queda la rabia”, “Nuestra profesionalidad no se cuestiona. Nuestro criterio clínico no se criminaliza”; los veterinarios han querido dejar patente su malestar por el Real Decreto 666/20023 y otras normativas que afectan al uso de los medicamentos veterinarios.

No entienden que se enfoquen desde la administración de la misma forma los medicamentos humanos con los que se da a los animales, que se restrinja más en España que en otros países europeos, que se obligue a los veterinarios a ajustarse a fichas técnicas de medicamentos que “están desactualizadas”, o que exista una gran carga burocrática entre otros.