Será el próximo 4 de abril cuando tenga lugar en la Audiencia provincia de Burgos el juicio oral en el que un joven arandino se puede enfrentar a una pena de 11 años de cárcel, acusado de un delito continuado de agresión sexual con penetración.
Los hechos se remontan al 25 de abril de 2021, cuando se encontraban en una fiesta en el barrio de Santa Catalina con otras personas. Entre ellas se encontraba la joven víctima de la agresión. Ella, junto con una amiga y el acusado decidieron marcharse sobre las 2:30 horas a casa en el vehículo que había llevado el acusado a la fiesta, quien señaló su intención de dejar a cada una en su domicilio.
Dejó a la primera, pero la acusación indica que cuando pasó por el domicilio de la víctima paso de largo indicándola que antes fueran a fumar. Le llevó por un camino que la perjudicada no conocía y paró el coche cerca de una casa de Campo situada en Aranda.
El escrito de acusación indica que ella rechazó besarle cuando lo intentó, y que después se bajó del vehículo, la tiró al suelo y se abalanzó sobre ella. En un primer momento logró escaparse, pero logró alcanzarla y violarla. Después, prosigue el fiscal, introdujo a la víctima a rastras en la finca continuando su vejación.
Con miedo por su víctima, esta le intentó tranquilizar diciendo que no iba a contar nada y consiguió que le llevase a su casa. Cuando llegó se dirigió al hospital. Además de las violaciones sufrió diferentes lesiones e importantes daños psicológicos y emocionales presentando un estado psíquico compatible con Trastorno por Estrés Postraumático, calificado como Secuela Psíquica, evolucionado desde un estado de Trastorno por Estrés Agudo. En la actualidad todavía necesita apoyo y asesoramiento psicológico.
Para el acusado se solicitan 11 años de prisión y libertad vigilada durante 7 años después de la pena privativa.
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