Ha sido gracias al trabajo de 30 personas voluntarias como se ha conseguido obtener un primer registro de las bodegas subterráneas de la localidad de Fuentenebro. Durante su trabajo se ha recopilado información de las 235 bodegas que se encuentran repartidas en cuatro barrios. Se incluyen las características de cada una de ellas, su localización, su uso, su estado de conservación, y la posible titularidad (en el 80% de los casos).
Un trabajo de recopilación de información, entre la que se destaca que sólo el 30% de ellas son utilizadas habitualmente en la actualidad, y que el 36% de las bodegas cuentan con merendero. En cuanto al estado de conservación, es bueno en el 67% de los casos, y en el 72% de las bodegas no existen riesgos exteriores aparentes.
El registro ya ha finalizado y se encuentra disponible para todos los vecinos, que pueden verlo en el salón de actos del Ayuntamiento los jueves de 10 a 14 horas. Del mismo modo, se han preparado formularios específicos para que cualquier persona interesada pueda solicitar modificaciones, completar información o aportar datos adicionales sobre las bodegas censadas.
Éxito en la Jornada sobre la Polilla del Racimo
También en Fuentenebro se celebraba la semana asada una jornada técnica sobre la Polilla del Racimo organizada por los ayuntamientos de Aldehorno, Fuentenebro, Honrubia de la Cuesta, Moradillo de Roa y Pardilla, junto con la Asociación Amigos del Alforjillas y la empresa Biogard, y con la colaboración del Consejo Regulador de la Ribera del Duero.
Una cita que reunió a más de 30 agricultores y que inició Alberto Tobes, responsable técnico del Consejo Regulador, quien destacó que es la primera vez que una zona tan amplia de la Ribera del Duero trabaja de manera conjunta para abordar un parásito como la Polilla del Racimo. Resaltó la importancia del uso de tratamientos respetuosos con el medio ambiente, que contribuyen a la excelencia de las uvas producidas en la región. “La colaboración entre municipios y el enfoque sostenible son clave para garantizar la calidad y el futuro de los viñedos de la Ribera”, afirmó.
A continuación, Alejandro Narvaiza ofreció una detallada explicación sobre la biología de este parásito, su impacto en las cosechas y las estrategias más eficaces para combatirlo. Narvaiza dedicó especial atención al método de confusión sexual mediante feromonas, un sistema que reduce significativamente la población de la polilla al impedir su reproducción, todo ello de forma respetuosa con el entorno. Su intervención despertó un animado turno de preguntas, en el que los asistentes mostraron gran interés por la aplicación práctica de estas técnicas.
La jornada concluyó con la presentación de la iniciativa de los Viñedos de Altura de la Ribera del Duero, que fue recibida con gran interés por los viticultores presentes. Este proyecto busca poner en valor los viñedos situados a mayor altitud, destacando su aporte a la calidad y el prestigio de los vinos de la región.
Imagen: @Ayuntamiento de Fuentenebro
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