A través de un escrito dirigido a la gerencia de Atención Primaria de Burgos y al coordinador del área rural, el alcalde de Fuentenebro reclama que la atención médica a los vecinos vuelva a realizarse dos días por semana. José Luis Pérez Pecharromán muestra así su desacuerdo ante una decisión unilateral y se muestra preocupado por la reducción de los servicios médicos en el pueblo.
Son muchas las quejas, comenta el primer edil, que llegan al Ayuntamiento ante esta merma del servicio. “Sabemos que esto no sucede sólo en nuestro pueblo, pero tenemos que reclamar para que se nos escuche. Hemos dejado pasar unos meses para conocer el impacto de esta medida y podemos asegurar que limita significativamente el acceso a la atención médica, lo cual resulta especialmente alarmante para aquellos que requieren atención médica regular en una localidad con una edad media muy alta”, comenta Pérez Pecharromán.
Desde el Consistorio se destaca “el excelente trabajo, compromiso y dedicación de los profesionales de la salud que trabajan en nuestro dispensario local”, pero aseguran que no puede pasar por alto el impacto negativo que esta disminución de servicios está teniendo en el pueblo.
“Entendemos que pueda haber razones detrás de esta decisión, pero instamos encarecidamente a las autoridades competentes a reconsiderar esta medida. La salud y el bienestar de los habitantes de Fuentenebro no deben ser comprometidos debido a recortes presupuestarios o restricciones logísticas”, señala el alcalde, quien asegura que garantizar un acceso adecuado a la atención médica es esencial para preservar la calidad de vida y el bienestar de todos los residentes de Fuentenebro.
Se adquiere la Casa del Cura
Por otro lado, el Ayuntamiento de Fuentenebro acaba de adquirir el edificio conocido como “La casa del cura”. Un inmueble que se suma a las propiedades municipales, que se pretende rehabilitar para transformarlo en un centro social multiusos que sirva para dinamizar la vida de los habitantes de la localidad.
En los bajos, explica su alcalde, habrá cabida para el bar social. Un servicio que se acaba de licitar y que primeramente se ubicará en un local privado que el Ayuntamiento ha alquilado hasta que la Casa del Cura se haya reformado.
Para el resto del edificio está todo por decidir: “estamos pensando de que manera enfocar las obras para aprovecharlo al máximo, porque de lo que se trata es de que pueda acoger las actividades que se realizan en el pueblo”, termina diciendo el alcalde fuentenebrino.
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