El arreglo de la carretera BU-912 es una promesa de la Junta de Castilla y León que se remonta en el tiempo. Estaba prevista la realización de los trabajos dentro del Plan de Carreteras 2012-2020, pero pasó el tiempo sin que se ejecutasen. Por ello, esa semana los representantes de cinco municipios ribereños han acudido a Burgos para mantener una reunión con el delegado de la administración autonómica en la provincia, Roberto Sáiz, y recordarle que la necesidad continúa.
Hasta allí acudieron alcaldes de Villanueva de Gumiel, Felipe Nebreda; Quemada, Francisco Javier Núñez; Gumiel de Izán, Jesús Briones, y Baños de Valdearados, Miriam Esteban; y el concejal de Caleruega José Ignacio Delgado.
La respuesta dio esperanza a los representantes municipales. Se les informó que la previsión era ejecutar el proyecto en el año 2026 y que la inversión que se preveía para ello era de 5,3 millones de euros.
Una carretera de 12 kilómetros, la BU-912, que une la localidad de Quemada con Gumiel de Izán, desde donde se accede directamente a la A-1. Pasa por el centro de Villanueva de Gumiel, pero también las localidades cercanas se ven perjudicadas en la actualidad por una carretera estrecha que se encuentra en bastante mal estado y con mucha falta de una actuación.
El proyecto, explicó el delegado de la Junta, prevé la construcción de una rotonda semiabierta en el cruce de la BU-912 con la BU-910, a la salida de Villanueva de Gumiel. También el ensanche del puente que cruza el río Bañuelos en esta localidad.
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