Más de un centenar de personas han apoyado en Madrid a los ciclistas ribereños que muy pronto han salido este sábado desde Aranda de Duero, a las siete de la mañana, para realizar un trayecto de 185 kilómetros. Los que distan hasta la estación de Chamartín en una marcha reivindicativa. Todos con un mismo objetivo, que el Gobierno de España considere la importancia que tiene el corredor Central para la comunicación entre el norte y el sur del país, teniendo en cuenta que la línea ferroviaria del Directo que une Madrid con Burgos pasando por Aranda de Duero es la más corta entre los dos puntos de salida y llegada.
Lanzan su mensaje pidiendo ayuda, porque aseguran que no cejarán en seguir pidiendo lo que beneficia, no sólo al tráfico de mercancías, sino también a las poblaciones por la que transcurre esta línea, que se están viendo en el más absoluto abandono en materia de conexiones.
Pablo de la Rubia, el que fuera impulsor de la marcha ciclista que tenía lugar hace casi un año con el mismo fin y que también ha liderado esta, ha sido el encargado de leer un manifiesto en Chamartín. Aseguraba que llegaban “agotados, pero satisfechos y orgullosos”. “Llegamos aquí para alzar nuestras voces en nombre de nuestra tierra y de todos aquellos que luchan por una mejor infraestructura y por la reactivación de nuestro Tren Directo Madrid- Aranda- Burgos”.
Este reto se ha cumplido con el apoyo de la Plataforma Cívica por las Infraestructuras de Burgos y su provincia, de la asociación de empresarios FAE-ASEMAR y del Ayuntamiento de Aranda. Recordaba De la Rubia que la plataforma se creó en 2023 con un propósito claro: “exigir el reconocimiento y la inclusión de nuestras necesidades en las decisiones políticas que se toman desde las más altas instancias, pidiendo respeto y futuro”.
Y eso es lo que se ha pedido en Madrid hoy sábado, respeto hacia los ciudadanos y futuro para los que están por llegar. “Hoy, un año después, hemos vuelto a recorrer estos caminos para mantener viva nuestra histórica reivindicación. Esta marcha no es sólo una muestra de nuestra resistencia física, sino un acto de reivindicación, un grito de orgullo por nuestra tierra, por Aranda y la Ribera del Duero. Queremos igualdad de oportunidades y desarrollo, queremos lo que es justo para nuestra tierra”, decía a los asistentes, asegurando que “Nuestro esfuerzo sobre la bicicleta es una metáfora del camino que aún nos queda por recorrer. Hemos pedaleado kilómetros, pero sabemos que aún queda mucho por hacer. Juntos, con vuestro apoyo, estamos seguros de que conseguiremos que nuestras voces sean escuchadas y que nuestras demandas sean atendidas”, terminaba diciendo con la respuesta de un gran aplauso por parte de los asistentes.
Y fueron los ciclistas los que tuvieron que esperar
La anécdota la ha puesto precisamente la falta de ferrocarril para que los ribereños puedan viajar a Madrid y la obligación de tener que hacerlo por carretera. El autobús fletado por el Ayuntamiento arandino para acudir a recibir a los ciclistas y participar en una concentración conjunta ha llegado tarde a causa de una retención de más de 30 minutos en la A-1. A pesar de ir con tiempo, esta ha sido una inconveniencia para llegar a la hora prevista.
El alcalde de Aranda de Duero, Antonio Linaje, viajaba con más de medio centenar de arandinos en ese autocar, y a través de sus redes sociales ha explicado lo que ocurría, dejando patente que lo ocurrido es una demostración de que “necesitamos su inmediata reapertura ya”
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