Lo intentaron en 2020 e incluso hay aprobada en las Cortes una Proposición No de ley por parte por unanimidad, pero nada se sabe desde entonces. La asociación Deportiva y cultural Conde de Galindo y el Ayuntamiento de Torregalindo no han conseguido que su cabalgata de Reyes Magos y su Belén viviente reciban la declaración de Interés Turístico regional. Por ello han surgido iniciativas para lograr que la Junta “no se duerma en los laureles” y reconozca esta cita que se lleva realizando desde hace 36 años y que, gracias al esfuerzo de todo un pueblo, logra atraer durante un día al año, el 5 de enero, a miles de visitantes llegados.
Conseguir esta declaración es algo que servirá para contar con un reconocimiento a nivel regional, pero también ofrece la posibilidad de recibir más ayudas para que la fiesta continúe y mejore en el tiempo.
Con un presupuesto anual de 12.000 euros, han sido varias las ocasiones en las que la Cabalgata de Torregalindo ha tenido que recibir inyecciones de dinero para acometer mejoras conforme su popularidad ha ido en aumento. Así, se ha logrado aumentar el itinerario y las zonas ambientadas del Belén Viviente, y con ello se han creado nuevos decorados, se han incrementado los puntos de iluminación, se han acondicionado más rincones de la localidad, se ha comprado material y se ha pavimentado un camino para favorecer la entrada y salida de vehículos al municipio.
Pero las necesidades van en aumento. Desde la asociación se quiere realizar una almazara de aceite, se quieren fabricar pellejos para acarrear el vino, contar con una exposición de instrumentos, o retomar la teatralización del Sanedrín. En infraestructuras se pretende adecuar el aparcamiento de vehículos, algo que hasta ahora no han podido solucionar teniendo en cuenta la fuerte inversión que supondría.
Alicia Pérez forma parte de la Asociación Conde de Galindo y es una de las personas que está impulsando esta reivindicación. Es por ello por lo que ha solicitado que las personas que deseen colaborar realicen vídeos reclamando la declaración institucional para rebotarlos a través de las redes sociales y remitírselos a la Junta de Castilla y León con la finalidad de que vuelva a retomarse la iniciativa. “Queremos moverlo con vídeos de gente, pidiendo más voz para que nos oigan, porque vemos que todo empezó bien, pero la cosa se ha paralizado totalmente”, explica.
Fue el enero de 2020, coincidiendo con su edición número 35, cuando los vecinos de Torregalindo solicitaban que su fiesta recibiese la declaración de Fiesta de Interés Turístico regional. Parecía que todo iba a ir rápido para este evento en el que más de 200 personas participan de forma voluntaria, porque apenas dos meses después la comisión de Cultura de las Cortes de Castilla y León aprobaban la PNL presentada por el grupo de Ciudadanos. Pero a partir de ahí, no ha habido más movimientos. Los responsables del proyecto agradecen el apoyo que han tenido hasta el momento, aunque muestran su preocupación al no haber tenido respuesta a su solicitud hasta ahora.
Entre tanto, y a falta de menos de un mes para la gran cita, los torrejanos ya están trabajando para que las calles de Torregalindo se conviertan el próximo 5 de enero en un Belén viviente a escala natural para recibir a los Reyes Magos. Tras un año de parón debido a la pandemia, las ganas son inmensas.
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