Y las tormentas volvieron a hacer de las suyas

El agua y las tormentas regresan a la comarca ribereña dejando estragos en el campo y daños. Roa de Duero y La Horra son dos de los municipios afectados.

En La Horra no es la primera vez, ya que es la tercera en este año que ha sufrido una tremenda granizada. Al campo no se puede entrar todavía porque continúa lloviendo, pero todo apunta a que los daños han sido catastróficos en los cultivos y el viñedo. La de este miércoles caía sobre las 16:30 horas y ha dejado unos 20 litros por metro cuadrado en apenas un cuarto de hora.

 

 

 

En Roa hay riesgo de derrumbe. Los bomberos voluntarios de la localidad han tenido que actuar esta noche, sobre las 23:30 horas, ante el peligro de derrumbe que está sufriendo el paseo del Espolón, cerca de la estatua del cardenal Cisneros. Y es que las adversidades meteorológicas han producido un movimiento de tierras que ha puesto en peligro la integridad del paseo y sus inmediaciones.

La situación en Roa es peligrosa, por lo que se pide que nadie se acerque a la zona afectada y “bajo ningún concepto” se sobrepase la zona delimitada por la cinta de bomberos, a la espera de que se actúe en la zona para mejorar la seguridad. También el tráfico se ha visto afectado porque los los derrumbes han llegado a una de las principales vías de acceso de la localidad, quedando parcialmente cortada a la circulación de la carretera BU-134 también conocida como R-30.

 

Imagen portada: Corte de la carretera en Roa./ DR