Pío Baroja encuentra su sitio en la nueva plaza de la Virgencilla

La escultura dedicada al escritor español Pío Baroja que se instalaba en la plaza de la Virgencilla de Aranda de Duero en julio de 2010, hace quince años, se desmontó con la ejecución de las obras de los Jardines de Don Diego. Y es ahora, con la remodelación casi terminada, cuando vuelve a encontrar un lugar.

Operarios municipales se encargaban de su reinstalación para que Aranda de Duero vuelva a contar con la figura de bronce realizada por la Escuela de Cerámica de la capital ribereña en 2005 bajo la dirección de miguel Martínez Delso.

En realidad, su ubicación actual dista apenas unos treinta metros de la anterior. Si antes se encontraba cerca de la calle San Gregorio, ahora se ha situado más cercana a la calle Ricaposada, muy cerca del paso de peatones que llega a esa calle.

La estatua rememora al autor de la generación del 98, en recuerdo al libro que Baroja dedicó a la ciudad en 1915 “Con la pluma y con el sable”.