La empresa cacereña Ovejero Sequeiro será, finalmente, la que se encargue de la gestión de los museos de Arte Sacro y Casa de las Bolas de Aranda de Duero durante los próximos cuatro años. La adjudicación ya se ha realizado, y el Ayuntamiento de la capital ribereña ha optado por la oferta más ventajosa económicamente.
La licitación de la gestión de los dos museos salía por 71.687 euros y Ovejero Sequeiro se ha ofrecido a hacerlo por 68.087.
Así, tal y como apuntaba la concejala de Turismo Olga Maderuelo a principios de semana, el próximo 3 de marzo abrirán sus puertas los dos espacios expositivos que llevan cerrados al público desde hace más de tres años.
La colección de arte Félix Cañada recoge las obras donadas por este coleccionista, que se encuentran en la Casa de las Molas de Aranda, un edificio del siglo XV de tres plantas. Se encuentra frente a la iglesia de San Juan, que contiene el museo sacro en su interior con piezas del patrimonio religioso de Aranda y la Ribera del Duero.
Obligaciones de la empresa
La adjudicataria deberá recepcionar a los visitantes y darles información, vigilar las salas, poner a punto las exposiciones y ocuparse de la apertura y cierre de los museos; además de encargarse de la limpieza.
Todo ello en un horario mínimo: de marzo a mayo y de octubre a diciembre de viernes a domingos de 16 a 18 horas (viernes y sábado) y de 11 a 14 horas (sábados y domingos). El horario de verano será de junio a septiembre, donde la apertura será de martes a domingo con horario de 11 a 14 y de 17 a 19 horas a excepción del domingo cuando el horario sólo será de mañana.
Y contratando al menos un trabajador con grado en turismo y un informador, ambos con conocimiento de francés e inglés, en el caso de la Casa de las Bolas, y un licenciado en turismo en el caso del museo sacro.
El precio para el visitante será de 2 € en el caso de la Casa de las Bolas, con descuento de un 50% para estudiantes, jubilados, mayores de 65 años, grupos de más de 10 personas, carnet joven, personas con discapacidad, familias numerosas y mono parentales, empadronados en Aranda o desempleados.
En el caso del museo Sacro, al tratarse de una iglesia propiedad del arzobispado, el precio deberá establecerse en la comisión mixta que forma junto con el Ayuntamiento arandino, revirtiendo el dinero al arzobispado.
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