La derrota en Luanco lleva a la Arandina a la última posición (3-1)

El próximo partido será ya en el 2024 ante el Zamora en el Juan Carlos Higuero

El 2023 acaba de la peor manera posible. La liga en 2ª RFEF se toma un descanso de varias semanas y la Arandina llega al parón navideño ocupando el farolillo rojo de la tabla. De nuevo se vino de vacío a domicilio al caer frente a un Marino de Luanco que aprovechó la visita ribereña para salir de los puestos de descenso y ocupar zona de permanencia. Los de Luarco remontaron el gol inicial de Fer Bajo en el minuto 10 al cabecear al fondo del marco de Dennis un balón centrado por Zazu. Parecían ponérsele de cara las cosas al equipo de Álex Izquierdo muy pronto pero en apenas cinco minutos el Marino volteaba el marcador con goles desde fuera del área anotados por Adolfo en el 15 y César en el 21. De nuevo tocaba remar después de llevar ventaja, un aspecto que se ha repetido ya en muchas ocasiones últimamente. Y las cosas se iban a poner aún más cuesta arriba cuando en el minuto 45 el colegiado gallego Fernández Rodríguez decretaba penalti por un discutible derribo de Raly a un jugador local. Esa jugada fue muy protestada por la plantilla ribereña y el colegiado sancionó a varios de sus integrantes con tarjeta. Una fue para Zazu, que apenas tres minutos después vio la segunda por una falta y tuvo que abandonar el terreno de juego.

 

Con un jugador menos comenzó la Arandina la segunda parte y a pesar de la inferioridad pudo acortar distancias con disparos de Ayoub, Alfredo, y Haji, este último ejecutando un libre indirecto dentro del área asturiana, pero no se acertó y el Marino reaccionó de nuevo encadenando varias jugadas de mucho peligro que Jara y el larguero se encargaron de desbaratar. El partido se fue diluyendo con el paso de los minutos y acabó de forma muy plácida en ambas áreas y sin apenas ocasiones que contar.

 

Esta derrota deja a la Arandina en la última plaza con 10 puntos, a siete de la permanencia que ocupa precisamente el Marino con 17. Son ya diez jornadas sin ganar las que acumula el equipo ribereño que comenzará el 2024 recibiendo al Zamora en el Juan Carlos Higuero el miércoles 10 de enero. Mucho trabajo por delante para intentar revetir esta delicada situación en la que se ha colocado el conjunto blanquiazul.