Magia, éxtasis, y regalo de reyes (2-1)

Foto: CM_Detailling

Hazaña histórica y que será recordada por mucho tiempo, quien sabe sí podrá volver a repetirse algo similar porque en la siguiente ronda tocará un pez gordo aún mayor, pero lo que está claro es que los cerca de 3.000 aficionados que acudieron al Juan Carlos Higuero un 7 de diciembre del 2023, ya guardan un recuerdo increíble en su memoria. La Arandina eliminó al Cádiz en 32avos de la Copa del Rey de forma merecida y marcándose un partidazo de garra, intensidad, concentración, definición, y corazón. También tuvo la fortuna de tener un aliado inesperado en este partido sobre el papel tan descompensado, la meteorología. La lluvia caída durante toda la jornada condicionó el terreno de juego hasta convertirlo en una cancha que no beneficiaba el normal desplazamiento del balón. Había charcos y balsas en algunos tramos del césped y en ese contexto la Arandina se adaptó mejor que el conjunto gaditano y se notó desde el principio. Los ribereños empujaron desde el pitido inicial y salieron confiandos en que podrían aprovechar el momento para hacer algo grande. Creyeron en sus posibilidades y con un trabajo colectivo espectacular sometieron al Cádiz, que apenas gozó de un par de ocasiones claras en todo el partido. La del gol del empate y un par de acercamientos con peligro en la segunda mitad. La Arandina, por el contrario, anotó dos tantos y pudo hacer otro par de ellos tranquilamente. El pez chico nadó mejor que el grande en las aguas revueltas del Juan Carlos Higuero.

 

Ya en el minuto 2 una cesión hacia el guardameta visitante estuvo a punto de convertirse en el 1-0, que no tardaría en llegar. Un par de minutos después, Haji llegó antes que nadie a un balón suelto en la frontal y se sacó un disparo ajustado al palo que significó el primer gol del encuentro. Ayoub pudo hacer el segundo  sobrepasada la media hora de juego pero en la primera llegada cadista Fede San Emeterio anotaba el empate a la salida de un córner. Con ese resultado se llegó al descanso.

Foto: Alberto Calvo

La cabeza del capitán doblega al Cádiz 

 

La segunda mitad fue encomiable desde el punto de vista físico y de entrega. Ya sin la lluvia se esperaba un Cádiz más avasallador, demostrando la diferencia existente entre ambas plantillas, pero fue la Arandina la que agrandó su figura y sus llegadas al área. Sí alguien mereció más fue el conjunto de Álex Izquierdo, espoleado por un público entregado, que no dejó de animar a sus jugadores, consiguió adelantarse de nuevo en una falta botada por Kevin que Pesca acertó a peinar al segundo palo. Imposible llegar para el guardameta Aznar. A partir de ahí el equipo ribereño supo nadar y guardar la ropa y el marco de Adrián. El Cádiz se vio de nuevo por detrás y trató de reactivarse con los cambios, pero ni por esas. Maxi Gómez buscaba algún balóh colgado sobre su cabeza pero apenas le llegó ninguno porque la Arandina dio un master defensivo para acabar muy cerca de hacer el tercer gol a la contra, especialmente un disparo de Raly que sacó el guardameta en una gran intervención.

 

El partido fue llegando a su fin y ni en los últimos 5 minutos del descuento la Arandina sufrió más de lo esperado, culminando la proeza de pasar a 16avos donde le espera uno de los cuatro grandes de la Supercopa que entran ya en acción en la Copa del Rey. El martes es el sorteo y hay una cosa clara con este formato. La bolita de la Arandina será emparejada con la uno de estos grandes del fútbol español y mundial: Barcelona, Atlético Madrid, Osasuna, o Real Madrid. El partido será en el Juan Carlos Higuero a eliminatoria única el 5-6-7 de enero. Un auténtico regalo de reyes y el gordo del sorteo del Niño para el club, la afición, y la ciudad. Se admiten apuestas. Ahora toca disfrutar esta noche pero mañana la plantilla empezará a preparar el partido de liga ante el Rayo Cantabria. Qué contrastes y que magia tiene el fútbol.