Los aficionados de la Arandina demostraron de que pasta están hechos y acudieron a las oficinas del club para retirar su correspondiente entrada a pesar de la subida de precios estipulada sin mediar aviso por el presidente del Alcobendas, Pablo Córdoba. Las entradas se agotaron en apenas dos horas y ya son tres los autobuses que el domingo acudirán a tierras madrileñas en busca del ansiado ascenso
La afición esperó un rato a la cola para adquirir su entrada
Desde que se abrieron las oficinas de la Arandina sobre las 18.00 horas el ir y venir de los aficionados blanquiazules en busca de entradas ha sido continuo. A un ritmo frenético y esperando un poco a la cola de la puerta se han ido haciendo con los pasaportes para estar presentes en un día muy anhelado por la parroquia blanquiazul. Sueñan con la posibilidad de vivir un ascenso a 2ª B y por eso no les ha importado esperar unos minutos el turno de coger las entradas. El cupo máximo eran 5 por persona y había dos modalidades: con plaza para autobús al precio de 28 euros y simplemente el ticket 20 euros. A cambio el club entregaba una especie de justificante que mañana canjeará por la entrada física porque todavía tienen que traerlas desde Alcobendas. Las 500 entradas prácticamente se agotaron en dos horas y ya hay 3 autobuses confirmados. El resto viajará en coches particulares. Por parte del club se abrirá una lista de espera por si se consiguen más entradas en los próximos días.
La mayoría de los seguidores estaban muy molestos con la subida de precios mandada por el presidente del Alcobendas Pablo Córdoba en el día de ayer y que rompía el pacto ético entre los dos clubes. Arandina y Alcobendas se habían comprometido a cobrar un precio único de 15 euros tanto en el partido de ida como en el de vuelta y parecía que esa cantidad era inamovible pero el club madrileño decidía ayer bajo criterio principal de su presidente subir las entradas 5 euros más y cobrarlas así a 20. Este cambio ha sentado muy mal en el seno del club blanquiazul y sobre todo en la afición arandina que no por eso dejará de acudir en masa al José Caballero. Eso sí, ahora con más ganas que nunca de festejar un ascenso histórico. Una pena, porque en estos días se ha hablado más de lo extradeportivo que de lo que verdaderamente importa. Primero con el famoso “tongo” del sorteo y luego con esta actitud poco caballerosa en cuanto a los precios de las entradas. Los seguidores de la Arandina se sienten estafados y engañados pero no tienen intención de variar su ilusión por estar en Alcobendas.
Otra opción es la de personarse en las taquillas del José Caballero que según el Alcobendas podrían abrirse al público el jueves a las 19.00 horas aunque todavía los horarios están por decidirse. La capacidad sigue siendo de 2.300 aficionados y parece cada vez más claro que el lleno está asegurado.
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