Los accidentes leves en el trabajo en la comarca ribereña han registrado una subida del 14% en 2023 con respecto al año anterior. Parecería una mala noticia si no nos fijamos en los accidentes graves, donde la disminución ha sido importante, en torno al 72% menos han ocurrido.
Y lanzando nuestra mirada a los accidentes mortales, la diferencia es del 100%, ya que estos han pasado de 3 en 2022 a ninguno en 2023. Pero eso no ocurrirá en 2024, ya que son dos accidentes mortales en el trabajo los que han tenido lugar: “Julio, que nos dejó en el mes de febrero mientras teletrabajaba en su domicilio, y Jorge, que falleció hace pocos días en el HUBU después de sufrir una parada cardiorrespiratoria en su centro de trabajo”.
Hoy se celebra el Día internacional de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, y los sindicatos CCOO y UGT han vuelto a salir a la calle, no tanto para celebrar como para reivindicar. Acusan al gobierno de Castilla y León de “poner palos en la rueda” para desestabilizar el trabajo de los sindicatos, como la retirada de las subvenciones al área de salud laboral.
Con respecto al número de accidentes, la comarca ribereña se sitúa en buen lugar. En Castilla y león los graves sólo bajan un 6% y los mortales un 25%. También, como ocurre aquí, los leves aumentan, pero en menor medida, un 2,5%.
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