El descenso generalizado en el consumo del vino y dos campañas sucesivas, las de 2022 y 2021, con un descenso de producción de uva son las causas que podrían estar detrás de los resultados de la venta de contraetiquetas para los vinos con Denominación de Origen Ribera del Duero en 2023.
Si en el año 2022 se vendían 100,7 millones de botellas de vino, el 2023 ha finalizado con un 90,6 millones, lo que supone un 10% menos. Pero lo cierto es que han sido los años 2022 y 2021 los únicos que han superado los 100 millones de contraetiquetas. Por ejemplo, en 2020 las contraetiquetas repartidas en las bodegas de la DO fueron 78 millones en un año atípico protagonizado por la pandemia, y el año anterior se superaron apenas los 89 millones.
En cuanto a tipos de vino, continúa el de cosecha siendo el líder de ventas. de los 90,6 millones de botellas vendidas 64 han sido de este tipo. Le sigue el vino de crianza con 21 millones de contraetiquetas y el de Reserva con 5,2 vendidas. El resto de las contraetiquetas han ido a parar a botellas de Gran Reserva.
Observando los meses, es sin duda el de noviembre, previo a las fechas navideñas, cuando más vino Ribera del Duero se ha vendido pasando de los 10,5 millones. Le siguen los meses de febrero y marzo. Los que menos, los de agosto y septiembre con 5 y 5,6 millones de contraetiquetas repartidas.
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