Domingo Ruiz Elvira "Chomin", "Tuvimos que hacer una colecta en una cena para comprar balones"

El Villa de Aranda cumplió 25 años de su fundación el pasado 11 de abril (Foto: @arcalle)

27/04/2025 8:04 | DR
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El club ha sacado una camiseta conmemorativa para conmemorar este aniversario

Charlamos con uno de los cinco socios fundadores de un club que nació desde la austeridad y ha llegado a convertirse en un fenómeno social y deportivo de primer orden en la comarca.

 

P. ¿Te acuerdas del día en que empezó todo?

 

R. Ha pasado mucho tiempo y las cosas se van olvidando, pero sí me acuerdo de cómo comenzó a surgir la idea de fundar un nuevo club. Nos juntamos un grupo de personas que jugábamos al balonmano en el año 2.000 para cambiar ciertas cosas a las que se necesitaba dar un giro, y sin pensarlo mucho dimos el paso adelante. Nos tiramos a una piscina sin agua y sin dinero, pero con ganas de darle un vuelco al balonmano. El 11 de abril, creo que era domingo por la tarde, nos juntamos en un bar del centro de Aranda Tobes, Felipe, Guayo, Jesús y yo. Hicimos una cena y firmamos el acta fundacional. Recuerdo que no teníamos ni un duro, tuvimos que hacer una colecta entre antiguos socios, directivos y aficionados para comprar balones, y ahí comenzó la historia del Villa de Aranda. Nadie pensaba de los que allí estábamos que se iba a llegar a lo que se ha conseguido este año por ejemplo. Lo de esta temporada es una gozada y un privilegio vivir y disfrutar los partidos en el Pabellón.

 

P. ¿Quién buscó los símbolos y estandartes del club?

 

R. También entre todos un poco. Para buscar el nombre pusimos varios encima de la mesa y el que más nos gustó fue el de Villa de Aranda, el color fue el amarillo porque estábamos locos al meternos en ese embolado, y el pollo porque alguien vio esa mascota en el Campeonato del Mundo de Japón, y después de darle unos retoques en el pico y en cuatro rasgos más, pues se quedó como emblema ya definitivo.

 

 

P. Y en la primera temporada ya se jugó fase de ascenso

 

R. Fue todo muy rápido porque también tuvimos mucho respaldo de la afición desde el principio. En el equipo no cobraba nadie y los jugadores eran todos de la casa, de Aranda. La ropa y las camisetas se sufragaron con la colecta y los viajes los pagó Suministros Weimar, nuestro primer patrocinador. A mí me tocó ser jugador entrenador de un grupo magnífico de amigos y de jugadores, todos de la tierra y arandinos. Nos clasificamos para jugar la final de Castilla y León y ganamos el título de campeones de 2ª en Soria. Luego perdimos la fase de ascenso en Aranda contra el Balonmano Leganés pero conseguimos un convenio de colaboración con el BM Alcobendas para que nos cediese la plaza en 1ª división y a partir de ahí el club fue creciendo gracias a la afición y las empresas que empezaron a confiar en el proyecto.

 

P. De todas formas, ya había un legado y un poso de que a la gente le gustaba mucho el balonmano en Aranda

 

R. Eso sí es cierto porque recuerdo acudir a los partidos que jugaba el Gromber, primero en el Pabellón Claret y después en el Príncipe de Asturias, y había grandes entradas. El Claret se llenaba los domingos por la mañana. Siempre ha habido mucha fidelidad al balonmano. La gente en esta época se volcaba y era un auténtico espectáculo. A muchos chavales de aquellos tiempos el balonmano nos enganchó rápidamente. Yo empecé jugando al fútbol y como portero, pero cuando cumplí 14 años empecé a jugar al balonmano.

 

P. Una vez en 1º división la cosa empezó a ponerse seria

 

R. Sabíamos lo que queríamos, pero no fue fácil. Ya en primera división elegimos a Chefe Navarro como entrenador y la temporada siguiente llegó Carlos Colmenero con Manolo Vecino y un buen número de jugadores desde Valladolid. Entre ellos Alberto Camino, los hermanos Grossi, etc… Comenzamos a dar importancia a la base y a las categorías inferiores creando una infraestructura de cantera y todo fue creciendo a su ritmo. Siempre con los pies en el suelo y mirando mucho el presupuesto ajustado. Pero conseguimos ascender en Elda con aquel increíble partido y el club volvió a dar otro paso importante. A partir de ahí llegaron momentos muy bonitos y muy difíciles también. Un momento muy delicado fue cuando salió al rescate el Grupo Gerardo de la Calle Artepref con Ana de la Calle colocándose de presidenta. Estábamos en una situación complicada y se salvó la entidad. Otro momento complejo y decisivo fue el de la reunión urgente que se convocó en el gimnasio del Pabellón. Ahí tuvimos que decidir en el verano del 2012 si aceptábamos la propuesta de subir a ASOBAL por la renuncia del Portland San Antonio. Veníamos de quedar segundos en la fase de ascenso en Cangas y estábamos haciendo el equipo para competir en Plata, pero se dio el paso. Era arriesgado, pero salió bien. Hay que agradecer a todas las personas que han ido pasando por la junta directiva en sus distintos momentos porque permitieron la continuidad primero y el crecimiento del club después.

 

 

 

P. ¿Pensabas que el club podría llegar a donde ha llegado aquel 11 de abril del 2000?

 

R. Para nada. Ni mucho menos. Lo hicimos con el corazón más que con la cabeza. Podía haber salido mal, pero oye han pasado 25 años y ahora mismo es una gozada ver balonmano en el Santiago Manguan. Sólo hay que ir a presenciar un partido y comprobar como está enganchada la gente, chicos jóvenes que están apoyando y viajando con el equipo, los resultados y el espectáculo que se vive con tanta pasión. Es muy bonito y un orgullo para la ciudad.

 

P. Todavía resuenan los ecos de tu famoso gol en Elda

 

R. Alguno me lo recordaba estos días. Pues otra cosa impensable, parecido a lo que pasó en Burgos hace unos meses. Teníamos que remontar cuatro o cinco goles faltando pocos minutos y en el deporte todo es posible. Y se logró. Me tocó a mi meter el último gol pero le podía haber tocado a cualquiera de los compañeros. Ese gol lo metimos todos porque éramos un equipo muy unido y esa fue la base del ascenso. Y aquí quiero destacar a Javi Arriaga porque todos mirábamos al marcador y nos veníamos un poco abajo, pero Javi nos empujó y nos llevó en volandas con su convencimiento de que podíamos hacerlo.

 

 

P. Aunque te hubiera parado el gol Patxi Peg, el portero de Elda, tarde o temprano el club hubiera tenido más oportunidades de ascenso

 

R. Seguramente. La afición estaba muy volcada y quizás a la siguiente temporada se hubiera logrado porque éramos un grupo magnífico de jugadores que nos llevábamos muy bien y estábamos muy compenetrados. Pero se consiguió allí y se disfrutó muchísimo.

 

 
4 Comentarios
 
 
 
Usuario  
#1   Fermin 27/04/2025 8:40:13
 
Grande Chomin

Yo creo que ya va siendo hora de retocar el Pollo….
 
 
 
 
 
 
Usuario  
#2   lobo7 27/04/2025 10:41:52
 
Y los buenos momentos que nos habéis echo pasar desde los tiempos del gromber, gracias chomete
 
 
 
 
 
 
Usuario  
#3   lobo7 27/04/2025 10:42:03
 
Y los buenos momentos que nos habéis echo pasar desde los tiempos del gromber, gracias chomete
 
 
 
 
 
 
Usuario  
#4   Padre Damián 27/04/2025 17:40:56
 
Buenas tardes nos dé Dios,
¡Enorme Chomete! Sois todo un orgullo para Aranda y la Ribera.
Y de la afición...¿Qué decir? MAGNÍFICA.
Ánimo y a seguir así: con humildad y con los pies en el suelo. Trabajo de hormiguitas.
 
 
 
 
 
 
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