De dineros y sentencias

Es momento de hablar de dinero y sentencias. La actualidad manda y se trata de dos temas que constantemente dejan buenos titulares y reacciones de todo tipo. Dinero como los 14 millones de remanentes que hay pendientes de repartir, que buscan un destino y un acuerdo. Entre ellos, se apunta a cantidades como las del proyecto del Centro de Turismo en la Casa de los Maestros que parece que se presentó casi a boleo por si había suerte, y ahora salen a relucir las deficiencias. Se necesita más inversión municipal (aproximadamente dos millones), el proyecto presenta evidentes carencias en el diseño de los trabajos y, además, el autobús turístico no puede salir del término municipal ni llevar al visitante de ruta a ver bodegas. Hubo un momento en el que los fondos europeos se tomaron como una especia de subasta. Se pujó, hubo suerte, un buen titular a pocos meses de las elecciones y, después, han venido los problemas.

En estos días, hay otras cantidades en el tintero. Por ejemplo, los 190.000 euros que se dedicarán al balonmano por su ascenso a Asobal, a mayores del convenio anual (63.000 euros). Una cifra similar a la que se concedía en enero, vía patrocinio, a la Arandina C.F para su partido contra el Real Madrid. Cantidad que no ha cobrado todavía el equipo de fútbol porque no ha presentado las facturas pertinentes, cosa que se está esperando en el Ayuntamiento. Parece que ha sentado cátedra esa cifra. Ahora que se estila lo de 190.000 a mayores de lo estándar, seguro que son muchas los colectivos sociales, aquellos que hacen una función por la población que tenía que ser asumida por la Administración (en especial la regional), que asisten perplejos al baile de cifras. Y no digo que los equipos no se lo merezcan, pero la labor que hacen colectivos como AFAR que lleva rogando una parcela para un lugar digno donde construir un nuevo centro, o Salud Mental o tantos otros, es digna de tener en cuenta.  Me dirán, seguro, que no aludo a Sonorama, pues sí, al festival se le adjudica 120.000 euros en patrocinio. Actividad que, por cierto, prevé realizar una inversión con fondos propios en la mejora de zona del Picón que se presentará próximamente.

Y de los dineros, vamos a las sentencias.  En los últimos días, la justicia ha hablado en algunos temas. La suma de despropósitos está alcanzando tintes de récord. La última sentencia ha anulado la bolsa de empleo de bomberos interinos promovida en el anterior mandato municipal. Resolución que afectará a uno de los trabajadores del parque y que se une a la anulación de la obligatoriedad de las horas extraordinarias y la suspensión por el artículo 33 de las vacaciones. Todo en la misma época, primavera-verano 2022. Eso nos hace recordar aquel momento convulso de decisiones a base de golpes en la mesa, con el “aquí mando yo” y que terminó incluso en expedientes y ‘persecuciones’. La justicia habla, pero tarde y con nulas consecuencias (más allá de la de las urnas).

Por si ya había poca polémica en el ámbito de los bomberos, ha irrumpido una nueva correspondiente a la jefatura. El TSJ pide al Ayuntamiento que aclare con documentación cómo fue el resultado del primer examen aprobado por el actual jefe interino. El anterior responsable, que suspendió la prueba, recurrió al Contencioso que archivó el tema. Según su órgano superior, lo hizo sin recabar toda la documentación necesaria, que hay que analizar y resolver. Y para rizar el rizo, de forma independiente y colateral, se pide que se abra un expediente sancionador por faltas graves a la secretaria general del Ayuntamiento. En un escrito de denuncia registrado por el abogado de los bomberos se explica que presidió ese Tribunal que decidía la Jefatura cuanto era presuntamente incompatible porque había compartido previamente el comité calificador de otras oposiciones con uno de los aspirantes (el anterior responsable del parque). Precisamente, en esa oposición previa fue donde no dejó a los representantes sindicales realizar su labor de supervisión del proceso para dotar de cuatro nuevas plazas al servicio de extinción de incendios. Ríanse de Juego de Tronos.