Las sentencias y los dineros centraron este espacio hace siete días. Y de nuevo, la justicia vuelve a irrumpir una semana más en la actualidad. Una nueva sentencia perdida y 500 euros del bolsillo de todos los arandinos para pagar el enésimo desmán en los Tribunales. Esta vez, para tumbar el expediente disciplinario abierto al portavoz de las reivindicaciones del cuerpo de extinción de incendios. Más allá de muchos otros detalles, llama la atención la puesta en escena elegida para ejecutar ese plan sancionador hace casi dos años. Da la sensación de que se montó como una especie de performace para intentar callar algunas bocas y sembrar ciertos temores entre los trabajadores municipales, tanto de dentro como de fuera del parque de bomberos (que no se revolucionara demasiado el gallinero). Digo espectáculo, porque se le dieron todos los ingredientes necesarios. Así, al más estilo juicio sumarísimo. Declaraciones de testigos, algunos con tonos de melodrama; subasta de castigos que comenzaron en 18 años y se quedaron en tres meses, con una forma de actuar casi inédita en un Ayuntamiento que ha visto asuntos gravísimos, y los expedientes disciplinarios ni estuvieron ni se les esperó. En Aranda se ha pagado más de ocho millones de euros por unos terrenos que no valían nada. En Aranda, en una época no tan lejana, las entradas del teatro iban a una caja B y se pagaba a los proveedores en cafeterías con dinero en mano que no aparecía en ninguna contabilidad. En Aranda, hay importantes denuncias internas en el Ayuntamiento que quedan en eso, en nada. Ni intención de expedientar. Podría seguir llenando folios con algunos de los capítulos más ‘negros’ de la vida municipal de los últimos tiempos, pero el espacio es finito…
Por todo ello, cuanto menos, rechina la forma diferenciada, ejemplarizante y desmedida que se tomó en ese asunto. Como también ‘mosquea’ la manera en la que se despidió a una letrada que luego tuvo que ser readmitida e indemnizada con 18.000 euros por los daños morales sufridos. Nunca, con anterioridad, se había visto un despido. Dos casos ejecutores que han acabado con correctivo en los juzgados y también poniendo en entredicho a todos los duchos en derecho involucrados en los procesos, por lo menos dos políticos y dos técnicos. Ahora que se ha abierto la veda de los expedientes, el riesgo que hay es que a alguno de los inventores se le vuelva en contra.
Y como llevábamos un mes sin hablar de liberaciones y puestos de confianza, ya lo íbamos echando de menos (léase con ironía) … Vayamos a por el nuevo capítulo. En principio, en el acuerdo de presupuestos entre el equipo de Gobierno y el PSOE se había decidido comenzar a negociar ese asunto el 10 de junio, una vez pasadas las elecciones europeas. Finalmente, esa reunión no se ha celebrado. El alcalde defiende que se ha mandado un borrador de propuesta al partido de la oposición, algo que los socialistas niegan. Mantiene que han hablado para concretar una reunión, extremo que también se desmiente. Uno lo anuncia en los medios, otros contestan en las redes sociales. Como aderezo, de fondo, la tensión de la abstención socialista en la votación presupuestaria. En definitiva, que todo sigue igual.
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
|