El fin de semana ha estado cargado de trabajo para los vecinos de Moradillo de Roa. Convocados por el Ayuntamiento de la localidad, acudieron en comunidad a realizar labores de limpieza en El Cotarro, el cerro donde se sitúan sus bodegas tradicionales.
Afanados por salvar su patrimonio, llevaron a cabo una excavación, en la que se vieron ayudados por una máquina con una pala y tractores con sus remolques. En el transcurso de la misma, dieron con la entrada a una bodega que parecía llevar años sepultada.
De igual modo, faenaron en la zona en la que se ubican los lagares-cueva, una de las más deterioradas debido a que estos hace tiempo que dejaron de emplearse y apenas existen merenderos que hagan que los vecinos acudan al lugar y puedan preocuparse por su mantenimiento.
Sin embargo, tal y como comenta José Ignacio Rincón, Concejal de Cultura, “aún quedan muchos problemas que solucionar, mucho trabajo que hacer y muchas áreas que limpiar, pero tras estas jornadas de limpieza se puede concluir que la iniciativa ha sido un éxito”.
Labores de promoción
José Ignacio Rincón se ha convertido en una importante figura de promoción para Moradillo, pues siempre tiene presentes sus bodegas y las exhibe allá donde esté. Así, durante este verano ha tenido lugar el curso Los Mundos del Vino, organizado por la Universidad Europea Miguel de Cervantes de Valladolid, donde ha estado el Concejal participando en una mesa redonda dedicada al enoturismo.
En este escenario se trasladó a los asistentes el plan ideado para aumentar las visitas a El Cotarro. Dicho proyecto se vertebra en dos fundamentos, la realización de audioguías que faciliten el reconocimiento de la zona al turista y la promoción de la elaboración del vino de la localidad, ideado como una fuente de ingresos con la que hacer frente a los gastos originados por el plan de recuperación de las bodegas.