María Vélez: "La felicidad que sientes al ver que otras personas son felices con tus servicios lo es todo"

Emprender en 2021 parece una locura, pero siempre hay gente dispuesta a arriesgarlo todo por sus pasiones

13/06/2021 8:24 | Adrián Carrasco

María Vélez es la fundadora de Veleza, una empresa que proporciona servicios de belleza y bienestar en diferentes pueblos de la comarca. Su iniciativa ha sido galardonada con el Premio Iniciativa Empresarial Joven de Asemar 2021. Hablamos con ella para conocer mejor cómo surgió la idea y cuál es el futuro de Veleza.

-¿Cómo surge la idea de un servicio de belleza y bienestar itinerante en el medio rural?

-Todo surgió en el mes de agosto de 2020 en donde, por primera vez, me di cuenta que la gente no podría trasladarse hasta Aranda de Duero, debido a los confinamientos que estábamos viviendo. Entonces, tomé la decisión de  emprender y desplazarme yo hasta esos pueblos a proporcionar a sus habitantes este tipo de servicios.

-En una situación tan inestable y complicada, como es una pandemia, ¿qué te impulsó a montar tu propia empresa?

-Dar un salto al vacío siempre asusta y, sobre todo, en la situación que nos encontramos. Pero, supongo que ese impulso provino de creer en mí misma y cerciorarme que este tipo de servicios hacían falta en los pueblos. Los clientes de las zonas rurales son una potencial clientela y había que explorarla. Por tanto, era cuestión de lanzarme un poquito a la aventura.

-Tras 20 años en el mismo centro de estética, ¿cómo reaccionó tu entorno?

-Mi entorno me apoyó en todo momento. Les pareció una idea fantástica, incluso en el centro donde estaba trabajando. Además, no solo tuve el apoyo de mis familiares y amigos, sino que también conté con la ayuda de diferentes centros. La asociación ADRI me ayudó a componer el plan de empresa, mientras que la Cámara de Comercio de Burgos me ayudó a darme de alta en autónomos y completar toda la documentación.

-¿Qué obstáculos has encontrado a la hora de montar tu negocio?

-Considero que no he encontrado ningún obstáculo, ya que he tenido muy buena acogida en todas las localidades. Yo me puse en contacto a través de correo electrónico con los ayuntamientos de varias poblaciones y, de aquellas que me dijeron que sí estarían interesadas en mis servicios, me lo hicieron muy fácil. Empecé con seis pueblos y, después de un mes y medio, trabajo en ocho.

-¿Qué experiencia buscas brindar a tus clientes?

-La experiencia que les ofrezco incluye masajes musculares, relajantes y anticelulíticos, entre otros. Sin embargo, yo creo que la verdadera experiencia es poder realizarse un tratamiento de belleza, en la sede de su pueblo, en zonas verdes y rodeados de naturaleza. Además, se ahorran tiempo, el desplazamiento y pagar zona azul.

-¿Qué variaciones has visto en los tipos de servicios que puedes ofrecer? ¿Se han visto reducidos al tener que desplazarse?

-No se han visto afectados para nada. Me desplazo en un turismo con etiqueta ECO, ya  que así contribuyo a reducir la contaminación en el medioambiente. Me caben ocho cajas en el maletero, la camilla e, incluso, transporto una maleta de estética avanzada para hacer tratamientos más específicos de rejuvenecimiento facial y mesoterapia corporal.

-¿Qué ventajas tiene esta forma de negocio con respecto a un centro de belleza no itinerante? ¿Y desventajas?

-La única desventaja que podría haber es la media hora de montaje que debo hacer una vez llego al sitio. Por el resto, no encuentro ninguna. En un centro de belleza, después de terminar la jornada laboral, estás una hora recogiendo, limpiando y desinfectado, y de esta forma, también inviertes el mismo tiempo. Y, si es por los veinte minutos de conducción, a mí me relaja, así que todo son ventajas.

-¿Ha cambiado tu visión sobre la estética?

-Mi visión no ha cambiado necesariamente, pero sí que es cierto que la relación con mis pacientes sí. Ellos están esperando a que yo llegue y voy cada quince días, por lo que la relación es mucho más personal. Conozco mejor cuáles son sus necesidades, nos mantenemos informados por WhatsApp y les puedo preguntar si les ha gustado el tratamiento. Y, si por algún casual no se pueden mover, yo misma me ofrezco a ir hasta sus casas.

-A pesar de las dificultades te has mostrado animada, ¿de dónde proviene ese optimismo?

-El optimismo proviene al darte cuenta de que hay que tomarse la vida con alegría, tirar hacia delante y emprender. La felicidad que sientes al ver que otras personas son felices con tus servicios lo es todo. Y sobre todo con los que yo le aporto: belleza, bienestar y salud.

-¿Tienes alguna visión para tu empresa de aquí a cinco años?

-No me gusta pensar con tanta antelación, especialmente mientras hay una pandemia. Prefiero trabajar, demostrar mis habilidades y dejar que el futuro me sorprenda.

-¿Qué se siente al ser ganadora del Premio Iniciativa Empresarial Joven de Asemar?

-Mucha felicidad y satisfacción personal. Es la prueba de que todo mi esfuerzo está dando sus frutos.