Una pulla traicionera
La alcaldesa acusó en el Pleno al concejal de Podemos de haber cometido una infracción con su vehículo
El pleno que se celebró anoche en el Ayuntamiento de Aranda dio lugar a una situación un tanto rocambolesca protagonizada por la alcaldesa, que acusó a un concejal, móvil en mano, de haber estacionado su vehículo en una plaza de aparcamiento reservada para personas con discapacidad.
Sucedió en el turno de ruegos y preguntas cuando era el momento de hablar del portavoz de Podemos, Andrés Gonzalo. Estaba realizando una petición para que desde el Ayuntamiento se garantizase la señalización y la accesibilidad en las obras que se ejecutaban para el Ayuntamiento o para aquellas que precisaban de licencia municipal. Y ponía un ejemplo: una bajante de escombros en la calle Carrequemada que obstaculizaba el paso sobre todo a las personas que van en silla de ruedas.
La palabra la tomó Raquel González teléfono en mano y enseñando una fotografía que tenía en él. “Es importante también aparcar bien en el coche y no en las plazas de discapacitados para que las personas puedan pasar. ¿Le suena este coche? (mostrando el teléfono) ¿Le suena este coche? Es el suyo aparcado en una plaza de discapacitados. Es el de usted, que me lo mandó un vecino y está usted al fondo comprando en el Delicias de mamá y el coche en la plaza de minusválidos”.
Gonzalo, que se encontraba a una distancia lejana para ver la fotografía contestaba: “No sé cuándo está hecha esa foto ni si ese coche es mío, pero reconozco que eso no está bien hecho”.
El portavoz del PSOE, Ildefonso Sanz, en su turno de palabra mostró su contrariedad por la humillación. “No se había dado nunca en lo que llevo en el Ayuntamiento que alguien entrase en temas personales no se había dado, se ha bajado al barro de la manera más vil. Ha sacado los pies de tiesto, lo que ha hecho no se hace con un concejal sea del grupo que sea”, argumentaba, señalando que al Ayuntamiento se viene a hablar de política”. “Si lo sabes díselo y no hagas publicidad, porque eso es humillar a la persona”, terminó diciendo.
Considerando lo ocurrido de ofensa, la otra concejal de Podemos, Mariángeles Pizarro, abandonó la sesión plenaria.
El pleno que se celebró anoche en el Ayuntamiento de Aranda dio lugar a una situación un tanto rocambolesca protagonizada por la alcaldesa, que acusó a un concejal, móvil en mano, de haber estacionado su vehículo en una plaza de aparcamiento reservada para personas con discapacidad.
Sucedió en el turno de ruegos y preguntas cuando era el momento de hablar del portavoz de Podemos, Andrés Gonzalo. Estaba realizando una petición para que desde el Ayuntamiento se garantizase la señalización y la accesibilidad en las obras que se ejecutaban para el Ayuntamiento o para aquellas que precisaban de licencia municipal. Y ponía un ejemplo: una bajante de escombros en la calle Carrequemada que obstaculizaba el paso sobre todo a las personas que van en silla de ruedas.
La palabra la tomó Raquel González teléfono en mano y enseñando una fotografía que tenía en él. “Es importante también aparcar bien en el coche y no en las plazas de discapacitados para que las personas puedan pasar. ¿Le suena este coche? (mostrando el teléfono) ¿Le suena este coche? Es el suyo aparcado en una plaza de discapacitados. Es el de usted, que me lo mandó un vecino y está usted al fondo comprando en el Delicias de mamá y el coche en la plaza de minusválidos”.
Gonzalo, que se encontraba a una distancia lejana para ver la fotografía contestaba: “No sé cuándo está hecha esa foto ni si ese coche es mío, pero reconozco que eso no está bien hecho”.
El portavoz del PSOE, Ildefonso Sanz, en su turno de palabra mostró su contrariedad por la humillación. “No se había dado nunca en lo que llevo en el Ayuntamiento que alguien entrase en temas personales no se había dado, se ha bajado al barro de la manera más vil. Ha sacado los pies de tiesto, lo que ha hecho no se hace con un concejal sea del grupo que sea”, argumentaba, señalando que al Ayuntamiento se viene a hablar de política”. “Si lo sabes díselo y no hagas publicidad, porque eso es humillar a la persona”, terminó diciendo.
Considerando lo ocurrido de ofensa, la otra concejal de Podemos, Mariángeles Pizarro, abandonó la sesión plenaria.