Precios populares para atraer el mayor número de abonados
La Asamblea de la Arandina ratificó a Virginia Martínez como presidenta y debatió una vez más la opción de transformar el club en SAD
Foto: DR
El éxito deportivo del ascenso tiene que convivir con una realidad compleja y preocupante desde el punto de vista de la gestión y la administración. Ese es uno de los principales mensajes que dejó encima de la mesa la Asamblea Extraordinaria de la Arandina celebrada en Ibercaja. La afluencia de socios rozó el medio centenar, y con sus votos favorables comenzó la sesión aprobando la continuidad de Virginia Martínez en el cargo de presidenta después de que ella misma pusiese su cargo a disposición de los socios. A partir de ahí la Junta Directiva expuso encima de la mesa un futuro complicado por la necesidad de contar con un presupuesto que actualmente con los recursos disponibles va a ser imposible de alcanzar.
Francisco Galán, como vicepresidente del club, y Javier Ávila, en calidad de colaborador, fueron desgranando los puntos más importantes para buscar apoyos y respaldos entre la población, las empresas, y las administraciones. Una vez que se cierre el ejercicio el 31 de junio se volverá a convocar otra Asamblea ya con las cifras y las cantidades definitivas del proyecto 2023-24, pero en un primer avance el presupuesto para salir a competir en 2ª RFEF rondará los 450.000 euros. La plantilla contará con 14 fichas profesionales a los que hay que añadir las retribuciones al cuerpo técnico. La nueva categoría lo exige por normativa y la Arandina está adaptándose a su nuevo rol, con un mayor número de gastos (sueldos, arbitrajes, desplazamientos, etc…), pero también otros ingresos extras, especialmente federativos y se espera que también haya mayor respaldo social.
Acercar al aficionado al Juan Carlos Higuero
Al respecto de la nueva campaña de captación de socios y abonados, la Arandina ya ha elegido el slogan y es “¿Seguimos Soñando”. Estamos en 2ª RFEF”. El objetivo pasa por atraer el mayor número de aficionados al estadio Juan Carlos Higuero y por eso se opta por poner los precios más populares y asequibles de la historia reciente del club. Eso sí, distinguiendo entre la figura de socio y abonado. El carnet de socio (que da opción a votar en las Asambleas y a involucrarse de manera directa en la gestión del club pudiendo adquirir acciones en una posible conversión futura en SAD) tendrá un coste de 110 euros. Y luego se sacarán dos carnets de abonados. Uno con el precio de 90 euros, y otro con el precio de 60 euros “de grada sol”, enfocado sobre todo a la gente joven y más apasionada en la tradicional zona destinada a las peñas y las charangas. Además los primeros 300 aficionados que se saquen el carnet de abonado en la grada sol tendrán un descuento de 10 euros. En el carnet estarán incluidos la Copa del Rey los partidos de pretemporada. Esa es la magnífica propuesta para atraer el mayor número de aficionados al estadio que la Arandina tiene intención de aprobar en la próxima Asamblea de julio.
La jornada concluyó con varios debates más, entre ellos un convenio de colaboración de filialidad con el Racing Lermeño, las propuestas realizadas por los distintos grupos políticos para mejoras y ayudas, y la necesidad de adaptar la legislación administrativa para allanar el camino hacia una probable conversión del club en SAD.
El éxito deportivo del ascenso tiene que convivir con una realidad compleja y preocupante desde el punto de vista de la gestión y la administración. Ese es uno de los principales mensajes que dejó encima de la mesa la Asamblea Extraordinaria de la Arandina celebrada en Ibercaja. La afluencia de socios rozó el medio centenar, y con sus votos favorables comenzó la sesión aprobando la continuidad de Virginia Martínez en el cargo de presidenta después de que ella misma pusiese su cargo a disposición de los socios. A partir de ahí la Junta Directiva expuso encima de la mesa un futuro complicado por la necesidad de contar con un presupuesto que actualmente con los recursos disponibles va a ser imposible de alcanzar.
Francisco Galán, como vicepresidente del club, y Javier Ávila, en calidad de colaborador, fueron desgranando los puntos más importantes para buscar apoyos y respaldos entre la población, las empresas, y las administraciones. Una vez que se cierre el ejercicio el 31 de junio se volverá a convocar otra Asamblea ya con las cifras y las cantidades definitivas del proyecto 2023-24, pero en un primer avance el presupuesto para salir a competir en 2ª RFEF rondará los 450.000 euros. La plantilla contará con 14 fichas profesionales a los que hay que añadir las retribuciones al cuerpo técnico. La nueva categoría lo exige por normativa y la Arandina está adaptándose a su nuevo rol, con un mayor número de gastos (sueldos, arbitrajes, desplazamientos, etc…), pero también otros ingresos extras, especialmente federativos y se espera que también haya mayor respaldo social.
Acercar al aficionado al Juan Carlos Higuero
Al respecto de la nueva campaña de captación de socios y abonados, la Arandina ya ha elegido el slogan y es “¿Seguimos Soñando”. Estamos en 2ª RFEF”. El objetivo pasa por atraer el mayor número de aficionados al estadio Juan Carlos Higuero y por eso se opta por poner los precios más populares y asequibles de la historia reciente del club. Eso sí, distinguiendo entre la figura de socio y abonado. El carnet de socio (que da opción a votar en las Asambleas y a involucrarse de manera directa en la gestión del club pudiendo adquirir acciones en una posible conversión futura en SAD) tendrá un coste de 110 euros. Y luego se sacarán dos carnets de abonados. Uno con el precio de 90 euros, y otro con el precio de 60 euros “de grada sol”, enfocado sobre todo a la gente joven y más apasionada en la tradicional zona destinada a las peñas y las charangas. Además los primeros 300 aficionados que se saquen el carnet de abonado en la grada sol tendrán un descuento de 10 euros. En el carnet estarán incluidos la Copa del Rey los partidos de pretemporada. Esa es la magnífica propuesta para atraer el mayor número de aficionados al estadio que la Arandina tiene intención de aprobar en la próxima Asamblea de julio.
La jornada concluyó con varios debates más, entre ellos un convenio de colaboración de filialidad con el Racing Lermeño, las propuestas realizadas por los distintos grupos políticos para mejoras y ayudas, y la necesidad de adaptar la legislación administrativa para allanar el camino hacia una probable conversión del club en SAD.