Alrededor de 400.000 euros son los que cuantifica la Asociación de Empresarios de Aranda y la Ribera (ASEMAR) como necesarios para que el Ayuntamiento incluya en los próximos presupuestos de Aranda de Duero en aras del desarrollo empresarial en la ciudad.
Porque además de la necesaria una inversión en el mantenimiento de los polígonos que ya hay, creen necesario que el suelo industrial se amplíe, como también opinan que es prioritario que Aranda de Duero cuente con un puerto seco, consiga conectarse a las red de hidrógeno y apostar por Fiduero.
Comenzando por el aumento de parcelas industriales, ASEMAR aboga por la puesta en marcha de un plan urbanístico para crear una segunda zona de suelo industrial en el polígono Prado Marina. Aseguran que si han llegado empresas estos últimos años fue gracias a la rápida urbanización del polígono ofreciendo parcelas grandes de 50.000 a 110.000 m2. “Si hoy en día se quisiera instalar en nuestra localidad cualquiera de estas empresas, no sería posible porque no existe disponibilidad de parcelas industriales de media o gran dimensión”, explican. Y teniendo en cuenta que la aprobación de un nuevo plan tardaría 4 ó 5 años, creen necesaria la contratación de su redacción de manera “urgente”, lo que supondría una inversión de entre 180.000 y 220.000 euros.
Lograr que Aranda cuente con un Puerto Seco también es muy importante para los empresarios arandinos. El pasado mes de septiembre lo manifestaban y la propuesta sigue sobre la mesa, contando con que en la actualidad el polígono Prado Marina cuenta con un acceso directo al ramal Ferroviario, “una ubicación única para el desarrollo de actividades de intercambio de mercancías intermodal carretera‐ferrocarril”, expresan. Y proponen la elaboración de un estudio técnico que aborde y redacte las necesidades para esta actividad y la creación de una zona de intercambio (Playa), la ampliación del desviadero del ramal y al menos tres espacios destinados a diferentes empresas que quieran desarrollar este servicio en el futuro. Para ello sería necesario dotar en los presupuestos del ayuntamiento una cuantía de entre 75.000€ y 90.000€.
El transporte de hidrógeno es una realidad, y ASEMAR dirige su vista el proyecto de la empresa Enagás, que en principio no contempla un hidroducto por Aranda de Duero. Teniendo en cuenta que el acceso a esta energía “puede decidir la viabilidad de nuestra industria pesada” opinan que es necesario impulsar la conexión a la red formando parte de la recién creada Asociación Castellano Leonesa del Hidrógeno, que intenta posicionar a Valladolid, Aranda de Duero y Burgos dentro de la red, lo que supondría una inversión de 3.000 euros al año.
Por último está Fiduero, que los empresarios siguen defendiendo como “un punto de apoyo necesario a la pequeña industria y comercio de la comarca. Su propuesta pasa por encontrar nuevas fórmulas de gestión externas y distintas a las anteriores, pero que den continuidad a un trabajo realizado durante décadas, en unas fechas más adecuadas. Por ello opinan que se deben seguir invirtiendo los 90.000 euros anuales que se utilizaban para su gestión.
Los cuatro proyectos forman parte del plan de estrategia plurianual de ASEMAR, desde donde ese espera que se relance la mesa de Desarrollo Industrial que se creó en octubre de 2021, además de dotarla económicamente.