Si hace algunos días anunciábamos que la comarca ribereña está esperando que lleguen 7 médicos de familia para la comarca ribereña y que áreas del Santos Reyes como anestesia y urgencias estaban necesitando de médicos de fuera para suplir sus carencias, las previsiones no son muy buenas en cuanto a otras especialidades se refiere.
Porque ha llegado el temido concurso de traslados para hospitales comarcales como el de Aranda de Duero, que no resultan apetecibles para los facultativos. Y la previsión es que el Santos Reyes pueda perder hasta 24 trabajadores que piden nuevos destinos, mientras que Aranda de Duero no ha sido seleccionada por ningún especialista.
Muy preocupante serán los casos de ginecología, oftalmología, cardiología y medicina interna. De los cinco ginecólogos cuatro han pedido traslado, y de las cinco plazas en medicina interna han pedido irse 3.
También buscan marcharse los 3 oftalmólogos que hay en la actualidad para un servicio que tendría que tener cuatro plazas ocupadas y los 2 dermatólogos. Por no hablar de cardiología, donde los dos cardiólogos que hay también aspiran a marcharse de Aranda de Duero.
En digestivo sólo había dos de las tres plazas ocupadas y uno de los profesionales ha pedido salir de Aranda en el concurso de traslados, en cirugía un especialista pide irse, como también un otorrino, 1 pediatra, 1 anestesista, 1 traumatólogo, 1 geriatra, 1 oncólogo, un hematólogo y 2 profesionales de rayos.
Ahora sólo cabe esperar al 15 de abril, momento en el que se acaba el plazo para que los profesionales tomen posesión de su plaza. Crucemos los dedos.