“Las empresas han demostrado tener resiliencia y están acostumbradas a asumir riesgos y buscar oportunidades para continuar trabajando”, esto es algo que ha querido dejar claro el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, en la ponencia que ha protagonizado en el curso de verano Prensa y Poder celebrado en el colegio San Gabriel.
Lo han demostrado y pone sobre la mesa varios ejemplos, el Covid que paralizó el mundo y a pesar de ello la logística funcionó, o la invasión de Ucrania o el conflicto de Gaza que ha provocado un cambio geoestratégico en el mundo. Pero si algo necesita de la política es “unas reglas del juego claras” para conocer “dónde nos movemos”, sin cambios incesantes que desestabilicen la continuidad de las empresas.
Opina que es necesaria la labor de la empresa y los autónomos en un país, el de España, donde el 98% de las empresas son pequeñas, con una media de 4,5 trabajadores. Y que ha sabido internacionalizarse en un mundo ya global. Y pone otro ejemplo, “en México más de 8.000 empresas españolas están instaladas de forma permanente”.
Garamendi apunta a la digitalización y la sostenibilidad como los dos grandes retos en este mundo global, para unas empresas que, aclara, “tienen que ganar dinero porque sino no funcionarían”.
Desde la CEOE defienden la constitución, la corona como eje vertebrador y la separación de poderes. Pero piden seguridad jurídica, unas reglas del juego claras, como también unos pactos que se cumplan y que se pongan en valor las vocaciones empresariales.
Garamendi vaticina un problema en lo relativo a las nuevas tecnologías cuando se comprueba que en España “hacen falta más de 35.000 personas gestionando ciberseguridad porque los ciberataques son permanentes, miles de puestos de ingenierías o de formación profesional de la rama de las carreras STEM (aquellas que se encuentran basadas en las ciencias, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas)”.
También asegura que además de este problema de aptitud se suma otro de actitud. “No tiene sentido tener casi 3 millones de personas en paro y que falte gente en la hostelería o conductores”, explica.
Por último, ha querido transmitir en Aranda de Duero a los empresarios y futuros empresarios que “existen fracasos, hay muchos más de lo que pensáis”. Por eso defiende una segunda oportunidad “porque el mundo de la empresa es un mundo de riesgo y donde más aprendes es sobre el fracaso”. Y añadía un nuevo consejo: “hay que pensar en grande”.