Los vecinos de Milagros que forman parte de la Plataforma que se ha creado para abordar la futura instalación de una planta de biogás en la localidad piden la dimisión, no sólo del alcalde, sino del resto de la corporación. Una exigencia que basan en “su falta de transparencia y su gestión negligente en temas que afectan directamente a la comunidad”, como la implantación de macroplantas de biogás.
Quisieron acudir al Pleno que se celebraba ayer miércoles, y se quejan de que sólo ocho personas pudieron acceder a la sala “a pesar de haber solicitado, a través de nuestra abogada, un espacio mayor que permitiera la entrada de más vecinos”.
Un Pleno con presencia de la Guardia Civil en el que, señalan, la comunicación con la corporación municipal fue “extremadamente difícil “, y donde aseguran que hubo faltas de respeto, llegando, el alcalde, a insultar a un asistente.
“Intentó cerrar el pleno de manera autoritaria, repitiendo varias veces que se acababa cuando él lo decía", comenta Aurora Vilariño, la portavoz de la plataforma. Tampoco el alcalde dio entrada formal, lamentan, a las firmas que se presentaron ante el Ayuntamiento contra la instalación de la planta.
“En una actitud aún más preocupante, una de los concejales insinuó que los vecinos habían firmado la petición coaccionados”, comentan, una afirmación que rechazan de forma rotunda.
“A pesar de nuestras demandas claras y legítimas, la corporación continúa sin escuchar al pueblo, mostrando su intención de seguir adelante sin atender las peticiones de los ciudadanos. Por ello exigimos de nuevo su dimisión inmediata”, señalan los afectados.