La polémica está servida entre PP y Sentir Aranda tras la celebración hoy lunes de la comisión de Asuntos Económicos. El alcalde de Aranda de Duero por parte de esta última formación política pide responsabilidad al Partido Popular, “especialmente a aquellos concejales que han mostrado una actitud sorprendente”. Y es que no entienden las manifestaciones que, argumentan, ha realizado hoy en la comisión el popular Alfonso Sanz, exconcejal de Urbanismo.
En esas manifestaciones, señala el alcalde arandino, el PP ha anunciado “que bloqueará los presupuestos del Ayuntamiento de 2025”. Y es que una de sus manifestaciones fue “que igual no les gustan los presupuestos”. Desde el equipo de gobierno aseguran que Sanz “ha amenazado con bloquear los presupuestos a menos que se descarte la nueva RPT y se apruebe la propuesta del PP”. “Es decir, condiciona la aprobación de los presupuestos a que se acepte la propuesta de RPT del PP que, durante el pasado mandato, aun contando con mayoría suficiente en el Pleno, no fueron capaces de sacar adelante”, critica Linaje.
El equipo de gobierno asegura sentirse “perplejo” ante estas manifestaciones que anuncian el rechazo de unos presupuestos que todavía no han sido siquiera presentados y que los grupos no conocen.
Esta situación se vivía esta mañana cuando en la comisión se abordaba el proyecto de la obra del campus de Aranda de Duero para la Universidad de Burgos, en el centro cívico, con los votos a favor del equipo de Gobierno, PSOE y Albertos Marcos y la abstención del PP y Vox. Alfonso Sanz consultaba acerca de los planes contingentes para la ejecución del proyecto si los presupuestos del Ayuntamiento para el próximo año no son aprobados. Una pregunta que fue contestada con la apelación a la colaboración de todos los grupos municipales para garantizar la ejecución de proyectos financiados con fondos europeos, como la nueva Universidad, que se incluyen en las cuentas municipales.
Por su parte, el concejal de Hacienda, Guillermo López, ha comentado en la comisión que se trabajará en la adopción de alternativas en el caso de que el bloqueo a los presupuestos ponga en riesgo la ejecución de proyectos financiados a través de los fondos europeos.