Catapatrimonio 2025 triunfa en Peñaranda de Duero

Con una cata que aunó vino, tapas y patrimonio

16/07/2025 9:02 | Begoña Cisneros

La primera edición de Catapatrimonio ha dejado un excelente sabor de boca en Peñaranda de Duero. El evento, celebrado el pasado sábado en el patio de armas del castillo, reunió a cerca de 200 personas en una experiencia enoturística única, donde el vino, la gastronomía y el patrimonio se dieron la mano.

La iniciativa, organizada por ADRI Ribera del Duero Burgalesa y financiada por SODEBUR, se ha integrado este año en la X edición de Cantacatavinos, una actividad ya consolidada que promueve desde hace una década la Asociación Cultural La Cantamora. Lo que comenzó como una cata popular en la Plaza Mayor ha evolucionado hasta convertirse en una cita cultural de referencia, con nuevo emplazamiento, música en directo y propuestas que conectan con la historia del territorio.

Catapatrimonio ha añadido este año una dimensión especial al evento, maridando cada vino con un elemento patrimonial de la Ribera del Duero y una tapa cuidadosamente seleccionada, en un formato original.

Entre las propuestas destacadas se encontraba Sensia 2024, un albillo mayor de la Bodega Castillo de Peñaranda, acompañado de una brocheta de queso y uvas, e introducido con un recorrido histórico por el propio castillo donde se celebró el evento. El rosado El Lagar de Isilla 2024 se sirvió junto a una tosta de sardina ahumada sobre cama de salmorejo, maridado con una narración sobre el Monasterio de La Vid y su biblioteca histórica.

Uno de los momentos más aplaudidos fue el maridaje del tinto ecológico Adaro 2022 (Pradorey) con jamón recién cortado en directo, mientras se repasaba la historia de la Finca La Ventosilla y su palacio barroco. El cierre de la cata llegó con Viña Curvada 2021 de Bodegas Trenza, acompañado por pastas artesanales y una evocación de los orígenes del vino en la antigüedad, con referencias a los mosaicos de Clunia y la villa romana de Santa Cruz (Baños de Valdearados).

La velada finalizó con un ambiente festivo, amenizado por la música en directo de Fernando y Ángela, que animó al público a bailar y celebrar una jornada marcada por la calidad de la experiencia.

Desde la organización se valora muy positivamente la acogida del público y se abre la puerta a futuras ediciones: “Esperamos que este formato sirva para seguir descubriendo el patrimonio de la Ribera a través del vino y la gastronomía”, han señalado.