Estudiantes de la Universidad Isabel I visitan el yacimiento de Klounioq en Quintanarraya
Para conocer los avances de la campaña arqueológica
El yacimiento arqueológico de Klounioq, situado entre los municipios de Quintanarraya e Hinojar del Rey, ha recibido la visita de un grupo de estudiantes, profesorado, personal administrativo y familiares de la Universidad Isabel I de Burgos. La actividad tuvo como objetivo conocer de primera mano los avances en la campaña de excavación de este verano.
La visita forma parte del convenio de colaboración firmado entre la Universidad Isabel I y la Asociación de Estudios de la Antigüedad y el Paleoambiente (D-Argia), promotora de la excavación. Este acuerdo consolida la participación de los estudiantes en actividades científicas y divulgativas, así como en la protección y puesta en valor del enclave.
Los arqueólogos Luis Valdés, Álvaro Sánchez y Marcos Iturriaga fueron los encargados de guiar al grupo, explicando la metodología de trabajo en el asentamiento arévaco, que incluye la limpieza, clasificación y catalogación de objetos culturales, restos biológicos y materiales de construcción hallados en la zona. Además, mostraron algunos de los hallazgos más relevantes y ofrecieron una interpretación actualizada de la evolución de la ciudad antigua.
La jornada culminó con una subida al alto de ‘Los Castrillos’, desde donde los visitantes pudieron apreciar la magnitud del enclave y comprender mejor la importancia estratégica que tuvo en la antigüedad.
Un enclave en el “confín de la Celtiberia”
El yacimiento de Klounioq, citado en las fuentes clásicas por Ptolomeo y Plinio, fue considerado en la época como el “confín de la Celtiberia”. Se trató de un lugar estratégico en la frontera entre arévacos y vacceos que protagonizó dos asedios relatados por Tito Livio y Dión Casio. La investigación arqueológica ha confirmado la existencia de hasta seis campamentos romanos que circunvalaban el castro.
Un siglo después, la ciudad romana de Clunia ocuparía el protagonismo en la zona, aunque sigue siendo un enigma cómo y cuándo se produjo el traslado de la aristocracia de Klounioq al vecino cerro de Alto Castro, en Peñalba de Castro.
Imagen: @D-Argia
El yacimiento arqueológico de Klounioq, situado entre los municipios de Quintanarraya e Hinojar del Rey, ha recibido la visita de un grupo de estudiantes, profesorado, personal administrativo y familiares de la Universidad Isabel I de Burgos. La actividad tuvo como objetivo conocer de primera mano los avances en la campaña de excavación de este verano.
La visita forma parte del convenio de colaboración firmado entre la Universidad Isabel I y la Asociación de Estudios de la Antigüedad y el Paleoambiente (D-Argia), promotora de la excavación. Este acuerdo consolida la participación de los estudiantes en actividades científicas y divulgativas, así como en la protección y puesta en valor del enclave.
Los arqueólogos Luis Valdés, Álvaro Sánchez y Marcos Iturriaga fueron los encargados de guiar al grupo, explicando la metodología de trabajo en el asentamiento arévaco, que incluye la limpieza, clasificación y catalogación de objetos culturales, restos biológicos y materiales de construcción hallados en la zona. Además, mostraron algunos de los hallazgos más relevantes y ofrecieron una interpretación actualizada de la evolución de la ciudad antigua.
La jornada culminó con una subida al alto de ‘Los Castrillos’, desde donde los visitantes pudieron apreciar la magnitud del enclave y comprender mejor la importancia estratégica que tuvo en la antigüedad.
Un enclave en el “confín de la Celtiberia”
El yacimiento de Klounioq, citado en las fuentes clásicas por Ptolomeo y Plinio, fue considerado en la época como el “confín de la Celtiberia”. Se trató de un lugar estratégico en la frontera entre arévacos y vacceos que protagonizó dos asedios relatados por Tito Livio y Dión Casio. La investigación arqueológica ha confirmado la existencia de hasta seis campamentos romanos que circunvalaban el castro.
Un siglo después, la ciudad romana de Clunia ocuparía el protagonismo en la zona, aunque sigue siendo un enigma cómo y cuándo se produjo el traslado de la aristocracia de Klounioq al vecino cerro de Alto Castro, en Peñalba de Castro.
Imagen: @D-Argia