
No es cierto, como se habla en algunos corrillos, que las piezas de alumbrado ornamental que se están colocando en las calles de Aranda de Duero tengan un peso desorbitado. Algunas voces han apuntado a los 200 kilos y por ello, la empresa adjudicataria del servicio quiere pronunciarse. Son voces que han salido al paso tras conocer la noticia de que dos piezas que se encontraban puestas en la plaza Mayor caían al suelo a causa de que cedió el forjado de un edificio al que estaba enganchado.
Tecmodeco es la firma adjudicataria del contrato de alumbrado decorativo y asegura que cada pieza tiene un peso de 12,2 kilos, por lo que el total del elemento caído cuenta con unos 25 kilos en total. “El ornamento estaba anclado a un balcón de forja que se rompió, lo que provocó la caída. La Policía Local se personó inmediatamente, asegurando la zona, realizó fotografías e informó a los titulares de los inmuebles afectados para que efectúen la posible reclamación por los daños ocasionados”, señalan desde un comunicado del Ayuntamiento arandino.
También se indica que a continuación se retiró todo el alumbrado festivo de la plaza Mayor para comprobar nuevamente los anclajes en los que se fijen estos elementos.
Una aclaración que viene dada porque “la falsa noticia sobre el peso ha generado alarma entre los vecinos y dificulta las labores de los trabajadores de la empresa adjudicataria”.